DICCIONARIO MÉDICO

Balanitis candidiásica

Qué es la balanitis candidiásica

La balanitis candidiásica es una inflamación del glande causada por el hongo Candida albicans, aunque otras especies del género Candida también pueden ser responsables. Este tipo de balanitis es más común en hombres no circuncidados y está asociada a factores predisponentes como diabetes mellitus, uso prolongado de antibióticos o inmunosupresión. Si no se trata adecuadamente, puede llevar a complicaciones locales o recurrentes.

La balanitis candidiásica es una infección micótica superficial que afecta al glande y, en ocasiones, al prepucio, siendo esta última condición conocida como balanopostitis candidiásica. Es más frecuente en hombres que presentan factores de riesgo que alteran la flora normal del área genital.

Diferencia entre balanitis y balanopostitis candidiásica

  • Balanitis candidiásica: afecta únicamente el glande.
  • Balanopostitis candidiásica: afecta tanto el glande como el prepucio, lo que puede dificultar la retracción del mismo.

Causas de la balanitis candidiásica

La balanitis candidiásica es causada por el crecimiento excesivo del hongo Candida, que normalmente se encuentra en pequeñas cantidades en la piel y las mucosas. Los factores que contribuyen a su desarrollo incluyen:

  • Higiene inadecuada: acumulación de esmegma bajo el prepucio.
  • Diabetes mellitus: niveles altos de glucosa en la orina favorecen el crecimiento de Candida.
  • Inmunosupresión: como en pacientes con VIH o en tratamiento con corticosteroides.
  • Relaciones sexuales sin protección: transmisión de Candida de parejas con candidiasis vaginal.
  • Uso prolongado de antibióticos: altera la microbiota natural de la piel.

Síntomas de la balanitis candidiásica

Los síntomas de la balanitis candidiásica pueden variar en severidad, pero generalmente incluyen:

  • Enrojecimiento y erupción en el glande.
  • Placas blanquecinas que pueden desprenderse.
  • Picazón intensa y sensación de ardor.
  • Hinchazón del glande y/o prepucio.
  • Fisuras o grietas en la piel afectada.
  • Dolor durante la micción o las relaciones sexuales.

Diagnóstico de la balanitis candidiásica

El diagnóstico de la balanitis candidiásica se basa en:

  • Examen clínico: observación de los signos característicos en el glande.
  • Microscopía: raspado de las lesiones para identificar hifas o esporas de Candida bajo el microscopio.
  • Cultivo microbiológico: útil en casos recurrentes o crónicos para confirmar el diagnóstico.

Tratamiento para la balanitis candidiásica

El tratamiento para la balanitis candidiásica incluye medidas tópicas y, en algunos casos, medicamentos sistémicos:

Tratamiento tópico

  • Antifúngicos tópicos: clotrimazol o miconazol aplicados directamente en el área afectada.
  • Higiene genital adecuada: lavado con agua tibia y jabón suave.
  • Evitar irritantes: abstenerse de usar productos perfumados en el área genital.

Tratamiento sistémico

  • Antifúngicos orales: fluconazol en casos graves o recurrentes.

Prevención de la balanitis candidiásica

Para prevenir la balanitis candidiásica, es fundamental:

  • Practicar una higiene genital adecuada, asegurando la limpieza diaria del glande y el prepucio.
  • Controlar condiciones subyacentes, como la diabetes.
  • Usar preservativos en relaciones sexuales para prevenir la transmisión de Candida.
  • Evitar productos irritantes en el área genital.

Complicaciones de la balanitis candidiásica

Si no se trata, la balanitis candidiásica puede conducir a:

  • Balanitis crónica: inflamación recurrente que puede dificultar la retracción del prepucio.
  • Fimosis: estrechamiento del prepucio que impide su retracción.
  • Infecciones secundarias: por bacterias oportunistas.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

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