Queratosis

¿Qué es la queratosis?

La queratosis es un término general que se refiere a cualquier afección de la piel que se caracteriza por un crecimiento excesivo y anormal de las células queratinocíticas de la epidermis, la capa más externa de la piel. La queratina es una proteína que proporciona resistencia y protección a la piel, y un crecimiento anormal de las células que producen esta proteína puede resultar en diversas afecciones cutáneas, que varían en apariencia y gravedad.

Existen varios tipos de queratosis, y la clasificación de estas condiciones se basa en sus características clínicas e histopatológicas. La queratosis actínica, también conocida como queratosis solar, es una afección cutánea precancerosa que se desarrolla como resultado de la exposición crónica al sol. Se manifiesta como pequeñas lesiones escamosas o costras en la superficie de la piel, y se localiza comúnmente en áreas del cuerpo que están frecuentemente expuestas al sol, como la cara, las manos y los brazos.

La queratosis seborreica, por otro lado, es una afección benigna que suele aparecer en la edad adulta o en la vejez. Las lesiones de queratosis seborreica son generalmente redondas u ovaladas, y pueden variar en color desde marrón claro hasta negro. Aunque estas lesiones pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, son más comunes en el tronco, la cara y el cuero cabelludo.

La queratosis pilaris es otra forma común de queratosis que se presenta como pequeñas protuberancias ásperas en la piel, a menudo en los brazos, los muslos y las nalgas. Aunque es más común en niños y adolescentes, la queratosis pilaris puede afectar a personas de todas las edades, y a menudo mejora con la edad.

El tratamiento de la queratosis depende del tipo de queratosis y de la gravedad de los síntomas. En muchos casos, el tratamiento se dirige a mejorar la apariencia de la piel y a prevenir la progresión a cáncer de piel. Esto puede implicar el uso de cremas tópicas que contienen retinoides o ácido salicílico, procedimientos de dermoabrasión para eliminar físicamente las lesiones, o terapias con láser para destruir las células anormales. En algunos casos, especialmente en el caso de la queratosis actínica, puede ser necesaria la extirpación quirúrgica de las lesiones.

La prevención es un componente clave en el manejo de la queratosis, especialmente para aquellas formas que están asociadas con la exposición al sol. Esto incluye el uso regular de protector solar, el uso de ropa protectora y la limitación de la exposición al sol durante las horas pico de radiación UV.

© Clínica Universidad de Navarra 2023