Radículo-neuritis

¿Qué es la radículo-neuritis?

La radículo-neuritis es la afectación inflamatoria de las raíces espinales y los nervios raquídeos. También se denomina síndrome de Guillain-Bane.

El sistema nervioso periférico se compone de nervios y sus raíces. Las raíces nerviosas son las estructuras que emergen directamente de la médula espinal, y se ramifican para formar los nervios que se extienden hacia varias partes del cuerpo. Estos nervios tienen la función esencial de transmitir señales entre la médula espinal y el resto del cuerpo.

Cuando hablamos de neuritis, nos referimos a la inflamación del nervio, mientras que el término radiculitis denota la inflamación de la raíz del nervio. Por lo tanto, radículo-neuritis describe una condición en la cual ambas, la raíz del nervio y el nervio mismo, están inflamados.

La radículo-neuritis puede ser el resultado de diversas causas, siendo una de las más comunes la compresión del nervio. Esto puede ocurrir debido a hernias discales, estenosis espinal, tumores, traumatismos o por procesos degenerativos asociados con el envejecimiento. Además, enfermedades autoinmunitarias, infecciones virales y algunas enfermedades metabólicas también pueden desencadenar radículo-neuritis.

El cuadro clínico de la radículo-neuritis se manifiesta con síntomas neurológicos que varían según la localización y la severidad de la inflamación. El dolor es uno de los síntomas más comunes y puede ser agudo, punzante o quemante. Además, los pacientes pueden experimentar debilidad muscular, entumecimiento, hormigueo o pérdida de la sensibilidad en la región inervada por el nervio afectado. En casos graves, la función del nervio puede verse gravemente comprometida, llevando a la pérdida total de movimiento o sensación.

El diagnóstico de la radículo-neuritis se basa en la historia clínica del paciente, el examen físico y estudios complementarios como la resonancia magnética (RM), la tomografía computarizada (TC) y los estudios de conducción nerviosa. Estas pruebas no solo ayudan a confirmar la inflamación del nervio y su raíz, sino también a identificar la causa subyacente.

El tratamiento de la radículo-neuritis se orienta a aliviar los síntomas y tratar la causa subyacente. Los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) son comúnmente prescritos para reducir la inflamación y el dolor. En casos donde la compresión del nervio es la causa, la cirugía puede ser una opción para aliviar la presión sobre el nervio. La rehabilitación con fisioterapia también juega un papel crucial en el manejo de esta condición, ayudando a mejorar la función y movilidad.

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