DICCIONARIO MÉDICO
Sensibilidad vibratoria
La sensibilidad vibratoria es una modalidad específica de la percepción somatosensorial, el sistema del cuerpo que procesa las sensaciones corporales. Esta sensibilidad permite a los seres humanos y a otros organismos percibir y responder a las vibraciones, una forma de movimiento oscilante que puede ser transmitida a través de diversos medios, como el aire, el agua y los sólidos. Esta sensibilidad está mediada por una clase especial de receptores sensoriales, los mecanorreceptores, que se encuentran en la piel y las estructuras subyacentes, así como en los tejidos profundos como los músculos, los tendones y las articulaciones. Los mecanorreceptores que detectan las vibraciones son conocidos como receptores de Pacini o corpúsculos de Pacini. Estos receptores, que son particularmente sensibles a las vibraciones de alta frecuencia, generan impulsos eléctricos en respuesta a la deformación mecánica de sus estructuras, que son transmitidos por las fibras nerviosas al sistema nervioso central. Los impulsos vibracionales son transmitidos a través de las vías sensoriales de la médula espinal hasta el tálamo en el cerebro, donde se procesan e integran con otras modalidades sensoriales. Desde el tálamo, la información se envía a la corteza somatosensorial primaria, ubicada en el lóbulo parietal del cerebro, donde se genera la percepción consciente de las vibraciones. La sensibilidad vibratoria es esencial para una amplia gama de funciones y habilidades humanas. Por ejemplo, juega un papel crucial en la discriminación de la textura de los objetos y en la detección de las vibraciones transmitidas a través de herramientas y otros objetos manipulados con las manos. También es fundamental para la percepción del movimiento y la posición de las partes del cuerpo, una capacidad conocida como propiocepción, que es vital para la coordinación y el control del movimiento. En el ámbito médico, la evaluación de la sensibilidad vibratoria puede proporcionar información valiosa sobre la función y la integridad del sistema nervioso periférico y central. La alteración de la sensibilidad vibratoria, ya sea una disminución o una pérdida de la sensibilidad, puede ser un signo de varias enfermedades y trastornos, como las neuropatías periféricas, las lesiones de la médula espinal, la esclerosis múltiple, el ictus y las enfermedades neurodegenerativas. Asimismo, la alteración de la sensibilidad vibratoria puede ser un indicador de deficiencia de vitamina B12, ya que esta vitamina es esencial para la función y la integridad de las fibras nerviosas. El tratamiento de los trastornos de la sensibilidad vibratoria generalmente se centra en la identificación y el manejo de la causa subyacente, y puede incluir una variedad de intervenciones, como medicamentos, suplementos vitamínicos, fisioterapia, terapia ocupacional y, en algunos casos, cirugía. También se están desarrollando y probando nuevas terapias y enfoques, como la terapia de estimulación eléctrica y la terapia de realidad virtual, para mejorar la sensibilidad vibratoria y la función sensoriomotora en las personas con alteraciones de la sensibilidad vibratoria. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es la sensibilidad vibratoria?
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