DICCIONARIO MÉDICO
Shock cardiogénico
El shock cardiogénico es una condición médica grave caracterizada por la incapacidad del corazón para bombear suficiente sangre al cuerpo. Como resultado, los órganos y tejidos del cuerpo no reciben suficiente oxígeno y nutrientes, lo que puede llevar a daños irreversibles y posiblemente a la muerte si no se trata de inmediato. El shock cardiogénico a menudo se presenta como una complicación de eventos cardiovasculares agudos, como un infarto de miocardio o ataque al corazón, en los que una parte del músculo cardíaco muere debido a una falta de flujo sanguíneo. La fisiopatología del shock cardiogénico se basa en una disfunción sistémica compleja en la que una serie de mecanismos compensatorios intentan mantener la presión arterial y el flujo sanguíneo a los órganos vitales. Cuando el corazón no puede bombear suficiente sangre al cuerpo, se activan varios mecanismos, como el sistema nervioso simpático, que intenta aumentar la frecuencia cardíaca y la contracción del corazón, y el sistema renina-angiotensina-aldosterona, que intenta mantener la presión arterial contrayendo los vasos sanguíneos y aumentando la retención de agua y sal. Sin embargo, estos mecanismos compensatorios pueden empeorar la situación en el largo plazo, ya que pueden sobrecargar aún más el corazón y disminuir aún más el flujo sanguíneo a los tejidos y órganos. El diagnóstico del shock cardiogénico se basa en la evaluación clínica, los exámenes de laboratorio y las pruebas de imagen. Los signos y síntomas pueden incluir una presión arterial baja, una frecuencia cardíaca rápida, cambios en el estado mental, como confusión o pérdida de conciencia, piel fría y sudorosa, disminución de la cantidad de orina y signos de insuficiencia orgánica, como dificultad para respirar debido a la insuficiencia pulmonar y alteraciones de la función hepática o renal. Las pruebas de laboratorio pueden mostrar alteraciones en los niveles de enzimas cardíacas, como la troponina y la creatina quinasa-MB, y signos de insuficiencia orgánica, como alteraciones en los niveles de creatinina y transaminasas. Las pruebas de imagen, como el ecocardiograma, pueden mostrar una disminución de la función de bombeo del corazón. El tratamiento del shock cardiogénico es una emergencia médica que requiere una intervención inmediata para mejorar la función de bombeo del corazón, aumentar el flujo sanguíneo a los órganos y tejidos y tratar la causa subyacente. Esto puede implicar medicamentos para aumentar la fuerza de las contracciones del corazón, reducir la carga de trabajo del corazón y aumentar el flujo sanguíneo a los órganos, así como procedimientos para restaurar el flujo sanguíneo al músculo cardíaco, como la angioplastia coronaria y la implantación de stents. En algunos casos, pueden ser necesarios dispositivos de asistencia ventricular o incluso un trasplante de corazón. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es el shock cardiogénico?
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