DICCIONARIO MÉDICO
Silla turca
La silla turca, un término de la anatomía médica que se refiere a una estructura específica en el esqueleto humano situada en la base del cráneo, más específicamente en el hueso esfenoides. El nombre proviene de su notable semejanza con los asientos usados en tiempos antiguos por los jinetes turcos. Esta estructura en forma de silla, con su "respaldo" hacia el norte y su "asiento" hacia el sur, es en realidad una pequeña depresión que aloja a la glándula pituitaria, una glándula endocrina fundamental para el funcionamiento del cuerpo humano. La glándula pituitaria, también conocida como hipófisis, mide aproximadamente un centímetro de diámetro y pesa alrededor de medio gramo. A pesar de su tamaño pequeño, tiene un papel esencial en el cuerpo humano ya que produce una serie de hormonas que regulan diversas funciones corporales, incluyendo el crecimiento, la función tiroidea, la regulación de los líquidos corporales, la producción de leche en las mujeres después del parto, la función de los ovarios y los testículos, y el metabolismo, entre otros. La silla turca, en su función de alojamiento de la glándula pituitaria, la protege y proporciona un espacio para que pueda desempeñar su función vital. Esta pequeña depresión se encuentra en una posición estratégica, entre los senos esfenoidales por debajo y el quiasma óptico por encima, lo que permite una interacción cercana entre la glándula pituitaria, el cerebro y otras estructuras vitales. Sin embargo, a pesar de su importancia, la silla turca no está exenta de problemas médicos. Las anomalías de la silla turca pueden dar lugar a una serie de condiciones clínicas, siendo los tumores pituitarios la más común. Estos tumores son en su mayoría benignos, pero pueden causar síntomas debido a su tamaño o a la producción excesiva de hormonas. Otras condiciones pueden incluir la silla turca vacía, una condición en la cual la silla turca parece estar vacía en una tomografía computarizada o resonancia magnética, pero en realidad está llena de líquido cefalorraquídeo y la glándula pituitaria se aplana contra los huesos de la silla turca. También puede producirse la silla turca grande, donde la silla turca es anormalmente grande, lo que puede ser una variante normal o estar asociado a condiciones como la hipopituitarismo. Los síntomas de las anomalías de la silla turca pueden variar dependiendo de la condición y la severidad de la misma. Pueden incluir dolores de cabeza, problemas visuales, cambios en el ciclo menstrual en las mujeres, disfunción sexual, y síntomas relacionados con la producción excesiva o insuficiente de hormonas pituitarias. El diagnóstico se realiza generalmente mediante pruebas de imagen como la tomografía computarizada o la resonancia magnética, y a menudo también se realizan pruebas de función pituitaria. El tratamiento para las anomalías de la silla turca depende de la causa subyacente. Puede incluir la administración de medicamentos para regular la producción de hormonas, la radioterapia, o la cirugía para remover tumores. La cirugía puede realizarse a través de la nariz y los senos paranasales, un procedimiento conocido como cirugía transesfenoidal. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es la silla turca?
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