DICCIONARIO MÉDICO
Tomocámara
La tomocámara, también conocida como cámara gamma o gammacámara, es un dispositivo médico utilizado en la medicina nuclear para detectar y crear imágenes bidimensionales y tridimensionales de la distribución de radiotrazadores en el cuerpo humano. La técnica se basa en la detección de radiación gamma emitida por isótopos radiactivos administrados al paciente, lo que permite obtener información funcional y metabólica de los órganos y tejidos de interés. Los radiotrazadores empleados en la medicina nuclear son compuestos químicos marcados con isótopos radiactivos, como el tecnecio-99m, yodo-131, galio-67, entre otros, que se unen a moléculas específicas del organismo, como proteínas, enzimas, receptores o transportadores, y se distribuyen en el cuerpo según las funciones biológicas y metabólicas de los tejidos y órganos. La administración de radiotrazadores puede realizarse por vía intravenosa, oral, inhalatoria o mediante inyección directa en la región de interés. Una tomocámara consta de uno o más detectores de radiación, llamados cristales centelladores, que convierten la energía de los fotones gamma emitidos por los radiotrazadores en destellos de luz. Estos destellos de luz son capturados por fotomultiplicadores, que los amplifican y convierten en señales eléctricas. Estas señales son procesadas por un ordenador, que reconstruye las coordenadas espaciales y la intensidad de las emisiones gamma, generando una imagen bidimensional o tridimensional de la distribución del radiotrazador en el cuerpo. La tomocámara es utilizada en una amplia variedad de estudios de medicina nuclear, como la gammagrafía ósea, la gammagrafía tiroidea, la gammagrafía pulmonar, la gammagrafía renal, la gammagrafía hepática, la gammagrafía cardíaca, entre otros. Estos estudios permiten evaluar la función y el metabolismo de órganos y tejidos, diagnosticar enfermedades y trastornos, monitorear la respuesta al tratamiento y planificar intervenciones terapéuticas. Una de las principales ventajas de la tomocámara es su capacidad para proporcionar información funcional y metabólica complementaria a las técnicas de imagen anatómica, como la radiografía, la tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (RM). Además, la medicina nuclear es menos invasiva que otros métodos de diagnóstico, como la biopsia o la cirugía exploratoria, y presenta un riesgo relativamente bajo para el paciente, ya que las dosis de radiotrazadores empleados son generalmente bajas y su vida media radiactiva es corta. No obstante, la tomocámara y la Medicina Nuclear también tienen sus limitaciones y riesgos, como la exposición a la radiación ionizante, las reacciones adversas a los radiotrazadores y la resolución espacial y temporal limitada en comparación con otras técnicas de imagen. Además, la interpretación de las imágenes de medicina nuclear requiere experiencia y conocimiento de la fisiología y patología del organismo, así como del comportamiento y las propiedades de los radiotrazadores empleados. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es la tomocámara?
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