DICCIONARIO MÉDICO
Trombolítico
Los trombolíticos son medicamentos que tienen la capacidad de disolver coágulos de sangre, o trombos, que han bloqueado el flujo de sangre en los vasos sanguíneos. Estos medicamentos son esenciales en el tratamiento de ciertas enfermedades cardiovasculares, como el infarto agudo de miocardio (ataque al corazón) y el accidente cerebrovascular isquémico agudo, en las que la rápida restauración del flujo sanguíneo puede prevenir la muerte del tejido y mejorar significativamente el pronóstico. El término "trombolítico" se deriva de las palabras griegas "trombos", que significa coágulo, y "lysis", que significa disolución. Estos medicamentos funcionan activando el sistema fibrinolítico del cuerpo, un sistema biológico que tiene como objetivo disolver la fibrina, una proteína clave que forma la estructura de los coágulos de sangre. Los trombolíticos activan el plasminógeno, una proteína en la sangre que se convierte en plasmina cuando se activa. La plasmina, a su vez, puede descomponer la fibrina y, por tanto, disolver los coágulos de sangre. Existen varios medicamentos trombolíticos que se utilizan en la medicina clínica, que incluyen el activador tisular del plasminógeno (tPA), la estreptoquinasa, la uroquinasa y la anistreplasa. Estos medicamentos tienen diferentes mecanismos de acción, pero todos funcionan para activar el plasminógeno y promover la disolución de los coágulos de sangre. El uso de trombolíticos requiere una cuidadosa evaluación y supervisión médica debido a su riesgo de causar sangrado. Antes de administrar un medicamento trombolítico, se deben evaluar ciertas contraindicaciones, que incluyen antecedentes de hemorragia intracraneal, cirugía reciente, trauma significativo y ciertas enfermedades de la sangre. Durante y después de la administración de un trombolítico, se deben monitorizar de cerca los signos de sangrado, incluyendo la realización de análisis de sangre para evaluar la capacidad de coagulación del paciente. A pesar de estos riesgos, los trombolíticos han demostrado ser altamente efectivos en el tratamiento de ciertas enfermedades cardiovasculares. En el infarto agudo de miocardio, por ejemplo, la rápida administración de un trombolítico puede restaurar el flujo sanguíneo al músculo cardíaco y reducir significativamente la mortalidad. Del mismo modo, en el accidente cerebrovascular isquémico agudo, los trombolíticos pueden restaurar el flujo sanguíneo al cerebro y limitar la extensión del daño cerebral. El desarrollo de trombolíticos ha sido un importante avance en la medicina cardiovascular y ha mejorado la atención y los resultados para muchos pacientes. Sin embargo, la investigación continua busca desarrollar medicamentos aún más efectivos y seguros. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es trombolítico?
¿Quiere estar al día sobre temas de salud?
Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos