La Clínica Universidad de Navarra participa en un estudio del sueño REM para predecir la enfermedad de Parkinson

El equipo de la Unidad de Sueño, con especialistas de Neurología y Neurofisiología, está involucrado en este estudio que busca marcadores para esta enfermedad neurodegenerativa

Imagen de la Dra. Elena Urrestarazu, especialista de la Unidad del Sueño de la Clínica Universidad de Navarra, durante una prueba del sueño.
La Dra. Elena Urrestarazu, durante un estudio del sueño.

19 de marzo de 2021

La Unidad del Sueño de la Clínica participa en un estudio multicéntrico en pacientes con trastornos de conducta del sueño REM para establecer marcadores de la enfermedad de Parkinson. Una investigación que se engloba dentro del proyecto INNOLFACT liderado por Navarrabiomed.

“El trastorno del sueño REM suele aparecer en personas mayores de 50 años y existe una relación entre este y la enfermedad de Parkinson”, explica la Dra. Elena Urrestarazu, especialista de la Unidad del Sueño. “No solo el trastorno de conducta de sueño REM es muy frecuente en pacientes con Parkinson, sino que pacientes con este trastorno del sueño tienen un riesgo elevado de desarrollar esta enfermedad neurodegenerativa en el futuro”, añade.

El objetivo de este estudio es encontrar marcadores que ayuden a predecir si estos pacientes van a desarrollar Parkinson y, de esta forma, la posibilidad de ralentizar su aparición. “Se ha visto que el 33% de pacientes con trastornos del sueño REM desarrollan Parkinson a los 5 años, mientras que más del 75% lo hacen a los 10 años”. 

Trastorno del sueño REM

El sueño se divide en distintas fases, en la fase REM es en la que se producen la mayor parte de los sueños, sobre todo los más vívidos y emocionales. Durante esta fase, el organismo tiene un mecanismo de relajación muscular para evitar el movimiento. 

“Los pacientes con trastorno de conducta de sueño REM pierden este mecanismo de relajación muscular por lo que escenifican sus sueños. Durante estos episodios pueden gritar, reír, llorar o hablar, incluso, dar manotazos o patadas, por lo que no consiguen un adecuado descanso”, detalla la Dra. Urrestarazu.