Un estudio internacional confirma que la terapia de mantenimiento evita la recaída en cáncer de ovario avanzado
El Dr. Antonio González ha dirigido el ensayo PRIMA/ENGOT-ov26, cuyos resultados a seis años se han presentado en el congreso ESMO y confirman el beneficio de un inhibidor de la enzima PARP después de la quimioterapia con platino
16 de septiembre de 2024
Los datos finales a largo plazo de un ensayo clínico realizado en 181 hospitales de todo el mundo han confirmado que el fármaco niraparib es beneficioso como terapia de mantenimiento para mujeres con cáncer de ovario avanzado. Las pacientes habían recibido este inhibidor de la enzima PARP después de haber respondido al tratamiento de primera línea de quimioterapia basada en platino.
El Dr. Antonio González Martín, director del Cancer Center Clínica Universidad de Navarra, especialista de su Área de Cáncer Ginecológico e investigador principal de este ensayo, destaca que el estudio, con un seguimiento de más de seis años, “muestra que el doble de pacientes con inestabilidad genómica en el tumor y que han recibido mantenimiento con niraparib están libres de progresión o muerte a los cinco años frente a las pacientes que no lo recibieron”.
La importancia de estos resultados, según el Dr. González, se explica por “el impacto negativo de la recaída del cáncer de ovario en la calidad de vida de las pacientes” y subraya que, “al no haber recaído a los cinco años, es poco probable que lo hagan y, por tanto, pueden estar curadas”.
El estudio PRIMA/ENGOT-ov26 ha sido esponsorizado por GSK y coordinado por el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Ovario (GEICO), que preside el Dr. González. Su objetivo era evaluar la eficacia de niraparib —un fármaco ya aprobado en España— como terapia de mantenimiento tras respuesta a quimioterapia de primera línea. Los resultados, que reflejan un seguimiento de más de seis años, se han presentado en el congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO) celebrado en Barcelona y se han publicado simultáneamente en la revista de alto impacto Annals of Oncology.
Junto a la supervivencia libre de enfermedad, los investigadores han presentado en ESMO los datos finales de supervivencia global entre las pacientes, que son muy similares en los dos grupos del ensayo. El Dr. González detalla que esto se puede explicar “por la larga supervivencia post-progresión que presentan las pacientes en este estudio, y por el elevado uso de inhibidores de PARP en la recaída de las pacientes que no lo recibieron en primera línea” y destaca que “a pesar del alto riesgo clínico de las pacientes incluidas en el ensayo PRIMA, la supervivencia global de las pacientes con inestabilidad genómica es superior a cinco años, y mayor a la observada en estudios previos”.
Un tumor en el que cada recaída acorta al tiempo para la siguiente
El cáncer de ovario es el octavo tipo de cáncer más común en mujeres en todo el mundo. A pesar de las elevadas tasas de respuesta a la quimioterapia con platino como tratamiento de primera línea, aproximadamente el 85% de las pacientes sufren una recaída de la enfermedad si no se realiza ningún tratamiento de mantenimiento. Además, con cada recaída se acorta el tiempo transcurrido sin que el cáncer progrese hasta que la mujer presente la siguiente regresión.
Los investigadores del ensayo han destacado que la inestabilidad genómica, también denominada déficit de recombinación homóloga, ocurre en el 50% de las pacientes con carcinoma seroso de alto grado, que es el tipo más frecuente de cáncer de ovario, y que eso predispone a una mayor respuesta a quimioterapia con platino y beneficio del mantenimiento con inhibidor de PARP.