Un estudio señala que la mayor rigidez del tejido adiposo aumenta los riesgos relacionados con la obesidad
Un trabajo del Laboratorio de Investigación Metabólica de la Clínica Universidad de Navarra ha estudiado las características biomecánicas del tejido adiposo. El exceso del tejido adiposo define la obesidad mejor que el exceso de peso y es el origen de un gran número de comorbilidades asociadas a esta dolencia.
3 de marzo de 2022
Un estudio del Laboratorio de Investigación Metabólica de la Clínica Universidad de Navarra ha analizado las características biomecánicas del tejido adiposo en animales y humanos comprobando en ambos casos que, cuanto mayor es el grado de obesidad, más fibroso y rígido es el tejido, lo que se asocia a su vez con más complicaciones graves de esta enfermedad.
“Al contrario de lo que muchos piensan, la obesidad no se define como un exceso de peso, sino como un exceso de tejido adiposo”, explica la Dra. Victoria Catalán, investigadora del Laboratorio de Investigación Metabólica y del CIBEROBN, que detalla que “ese aumento del tejido adiposo es lo que va a originar un gran número de comorbilidades o dolencias asociadas a la obesidad, como pueden ser la diabetes tipo 2, las enfermedades cardiovasculares o los problemas articulares”. Los investigadores también subrayan la relación entre el exceso de tejido adiposo y el desarrollo de tumores.
Este tejido adiposo es disfuncional en pacientes con obesidad, pues no secreta las moléculas que debería, al no expandirse de manera adecuada. Así, el volumen y el número de los adipocitos aumenta de tal manera que acumulan muchos lípidos -lo que se denomina hipertrofia e hiperplasia-. “Por tanto, cuanto mayor es el grado de obesidad en el paciente, se produce una mayor disfunción del tejido adiposo, pues se torna más rígido y fibroso, lo que impide que se extienda correctamente”, aclara la Dra. Gema Frühbeck, codirectora del Área de Obesidad de la Clínica e investigadora del CIBEROBN.
Prototipo para medir las fuerzas del tejido adiposo
Estas fuerzas biomecánicas del tejido adiposo que se encuentran alteradas han podido ser medidas gracias a los equipos electromecánicos diseñados y fabricados con una impresora 3D por Xabier Unamuno, alumno del Programa de Doctorado en Medicina Aplicada y Biomedicina, cuya tesis doctoral casa con el asunto primordial de esta investigación.
“Con estos equipos desarrollamos unos prototipos que nos permitieron estudiar las propiedades elásticas y la capacidad de deformación de los adipocitos en el tejido adiposo, tanto de animales como de humanos”, explica Xabier Unamuno.
La Dra. Gema Frühbeck concluye que “en los modelos animales, hemos visto que esas propiedades biomecánicas cambian o mejoran tras una cirugía bariátrica para el tratamiento de la obesidad. El tejido adiposo adquiere un mayor contenido en vasos sanguíneos y un descenso en colágenos, es decir, gana oxígeno y reduce las situaciones de hipoxia, lo que disminuye la inflamación y la fibrosis”.