Las reglas de oro para cuidar los riñones
La enfermedad renal crónica es un problema de salud que afecta aproximadamente al 15% de la población, y con importante crecimiento anual. Además, lo hace de forma “silenciosa” (4 de cada 10 la padecen y no lo saben) y tiene elevada mortalidad (será la segunda causa de muerte en el mundo la próxima década).
Desde la Clínica creemos que el conocimiento de cómo cuidar los riñones puede ayudar a reducir la incidencia de esta enfermedad:
Por ello, el Dr. Javier Diéz, codirector del Servicio de Nefrología, estas recomendaciones:
1. Mantengase en forma: un peso corporal adecuado ayuda a reducir la presión arterial y el riesgo de enfermedad renal crónica. Caminar, correr, montar en bici, pasear por la montaña… Elija la que más te guste y mantengase activo.
2. Sigua una dieta sana. La alimentación saludable también ayuda a reducir la presión arterial y prevenir la diabetes, las enfermedades cardíacas y otras afecciones asociadas con la enfermedad renal crónica. Sigua una dieta mediterránea en la que prevalezcan los alimentos frescos y se limite al mínimo la cantidad de alimentos procesados (se reduce el consumo de sal).
3. Beba (más) agua. El nivel adecuado de ingesta de líquidos para cualquier individuo depende de muchos factores, incluidos el ejercicio, el clima, las condiciones de salud, el embarazo y la lactancia. Normalmente, esto significa 8 tazas, aproximadamente 2 litros por día para una persona sana.
4. Deje de fumar. El tabaco reduce el flujo de sangre a los riñones. Cuando llega menos sangre a los riñones, puede disminuir su capacidad de funcionar normalmente. Fumar también aumenta el riesgo de cáncer de riñón en aproximadamente un 50%.
5. No se automedique. Los medicamentos comunes como los antiinflamatorios y analgésicos (por ejemplo, el ibuprofeno) pueden dañar los riñones si se toman regularmente. Además, si tiene una enfermedad renal, tomar solo unas pocas dosis puede dañarte. En caso de duda, como siempre, consulte con tu médico.
6. Evite el consumo de ciertas hierbas medicinales que contienen substancias tóxicas para el riñón (por ejemplo, las plantas del género Aristolochia que se emplean para adelgazar y cuyo agente tóxico es el ácido aristolóquico)».
7. Hágase controles periódicos. Especialmente si tiene uno o más de los factores de ‘alto riesgo’: diabetes, hipertensión o antecedentes familiares de enfermedad renal. Pero también si no los tienes, porque ¿sabías que casi la mitad de las personas que tienen diabetes no saben que la tienen? Aproximadamente la mitad de las personas con diabetes desarrollan daño renal; pero esto se puede prevenir.