7 reglas de oro para tener una boca sana
Los beneficios que conlleva una correcta higiene dental repercuten en la salud en general, tanto en la calidad de vida como en las interrelaciones sociales. La Organización Mundial de la Salud afirma que el 60%-90% de los escolares y casi el 100% de los adultos tienen caries en todo el mundo.
Cuidar nuestros dientes conlleva muy poco tiempo al día, pero es necesario hacerlo de forma correcta. Generalmente, los motivos más habituales por los se acude a consulta son el dolor, la dificultad al masticar o por una razón estética, como la mejora de la sonrisa. Aunque en muchas ocasiones estos síntomas están mezclados.
“Hay que lavarse los dientes tres veces al día”. Estamos cansados de escuchar esta frase por parte de nuestros padres, pero la Dra. María Gallego, odontóloga especializada en Odontopediatría y Ortodoncia en la Unidad dental de la Clínica Universidad de Navarra, afirma que no solo es importante la frecuencia sino también la duración, la técnica y el cepillo que utilicemos.
- Lo más recomendable es cepillarse los dientes después de cada comida. Si no es posible, al menos tres veces al día. Sin embargo, la doctora insiste: es muy importante cuidar la higiene dental antes de acostarse.
- Es necesario cepillarse los dientes durante, al menos, dos minutos y no dejar pasar más de 20 minutos desde que se terminó de comer. La doctora recomienda crear una pauta, una rutina, a la hora del cepillado, por ejemplo, empezar por la parte derecha de la boca y después pasar a la izquierda, para asegurarnos que la limpieza es completa.
- Hilo dental: todos los días. Sí, todos. También podemos utilizar cepillos interproximales que, junto al colutorio, ayudan a conseguir una correcta higiene bucal.
- No solo es suficiente con cepillarse los dientes, la lengua es la gran olvidada. Podemos utilizar raspadores linguales o, incluso, el cepillo de dientes. Se debe limpiar la lengua con un movimiento de atrás hacia delante para arrastrar las bacterias.
- Es necesario cambiar el cepillo cada tres meses. La doctora recomienda utilizar aquellos que tengan cerdas suaves y puntas redondeadas para que no se ejerza demasiada presión sobre el esmalte del diente y acaben deteriorándolo.
- “Cuando comemos fuera de casa y no tenemos posibilidad de lavarnos los dientes, los chicles o caramelos con xilitol pueden ayudar a retirar los alimentos y, sobre todo, favorecen la producción de saliva”, explica. Sin embargo, añade que siempre que se pueda es mejor cepillarse los dientes, ya que no sustituyen el cepillado: “Recomiendo a los pacientes que tengan otro cepillo en la oficina y que sus hijos se lo lleven al colegio”.
- Acudir regularmente al dentista. Es aconsejable visitar al dentista para que realice una revisión de la boca por lo menos 1-2 veces al año.
Consejos para el cepillado
- Cepillarse después de cada comida: no dejar pasar más de 20 minutos.
- Duración del cepillado: 2 minutos
- Uso diario de hilo dental
- Cambiar el cepillo cada 3 meses
- Acudir regularmente al dentista