Tabaco: "Cuanto más tarde se deje, mayor riesgo de cáncer de pulmón"
Cáncer de pulmón, EPOC o enfermedades cardiovasculares. Son solo algunas, las más importantes, de las enfermedades que tienen como causa el tabaco, que se ha convertido en la principal causa aislada de morbilidad y de mortalidad prematura evitable en España según las estadísticas. Sin embargo, en nuestro país hay más de 8 millones de fumadores, una cifra que ha ido creciendo en los últimos años.
No solo ha aumentado la cifra de personas que fuman, sino que ha ido disminuyendo el número de exfumadores y la percepción del riesgo que el tabaco tiene en la salud. Así lo ha demostrado la última encuesta de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria. Una percepción errónea, incluida entre las personas que ya han dejado el tabaco.
Al dejar de fumar, el riesgo de tener un cáncer de pulmón comienza a disminuir enseguida pero tarda muchos años en desaparecer, si es que desaparece del todo”, advierte el Dr. Javier Zulueta, director del Departamento de Neumología de la Clínica Universidad de Navarra. “Hay que recordar que hoy en día por pura estadística hay más cánceres diagnosticados en exfumadores que en fumadores activos, porque hay más exfumadores que fumadores”, añade el especialista.
Pese a que todavía se está estudiando, y se desconoce al ritmo que desciende el riesgo, ya hay indicios que demuestran que, incluso 20 años después, el que ha fumado todavía tiene algo más de riesgo para desarrollar cáncer que aquel que no lo ha hecho. ¿Qué influye para que persista a lo largo de los años?
La edad en la que se deja de fumar “parece ser” el factor más importante a la hora de disminuir el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón. “Si se deja de fumar antes de los 35 años o hasta los 35, por mucho que se fume previamente, el riesgo es mucho menor que si uno deja de fumar a partir de los 40 o 45 años de edad. Es decir, cuanto más tarde se deje de fumar, mayor es el riesgo”, apunta el Dr. Zulueta. “No obstante, esto no quiere decir que no sea beneficioso dejar de fumar más allá de los 35 años de edad”.
Pero cuándo se deja de fumar no es el único factor a tener en cuenta. Las mujeres tienen más riesgo que los hombres y la presencia de otras dolencias también influyen. “En ensayos de la Clínica, se ha demostrado que quien tiene enfisema de pulmón, detectable en un TAC de cribado, tiene tres veces más riesgo de tener un cáncer de pulmón que los que hayan fumado lo mismo pero que no tengan enfisema”, reconoce.
Por último, la cantidad también entra en juego. “Cuanto mayor sea la dosis de tabaquismo, mayor es el riesgo”. Para cuantificarlo, los expertos, emplean la siguiente fórmula: el número de paquetes al día multiplicado por el número de años que has fumado. Por ejemplo, una persona que fuma un paquete diario durante 10 años, tiene un índice de 10 paquetes/año.
“Pero parece que es más importante la edad a la que dejas de fumar. Para los que dejan de fumar, cuanto antes se deja, mejor. Si se consigue dejar antes de los 40 años, el riesgo de cáncer de pulmón disminuye y es bastante bajo”, recalca.
Programa de cribado
El cáncer de pulmón encabeza las listas de prevalencia y de mortalidad, debido esto último a que en la mayor parte de los casos se detecta tarde. “El 85% o más de los pacientes con cáncer viven menos de 5 años”, señala el Dr. Zulueta y explica que “el cáncer de pulmón se desarrolla y progresa sin producir síntomas hasta que no está en estadios muy avanzados, en el III y IV, cuando ya no es curable”.
Un pronóstico “radicalmente” distinto si el tumor es detectado de forma precoz. Por ello, los programas de cribado son fundamentales: “el 85% de los pacientes que son diagnosticados de un cáncer durante un screening están vivos 10 y 15 años después”. Un programa que consiste en un TAC de baja radiación de forma anual y que está destinado a personas de alto riesgo (mayores de 40 años y con un índice de tabaquismo de al menos 10-20 paquetes-año, que puede traducirse en 1 o 2 paquetes al día durante 10 años).