Borreliosis

Qué es la borreliosis

La borreliosis, también conocida como enfermedad de Lyme, es una enfermedad infecciosa causada por bacterias del género Borrelia. Estas bacterias son transmitidas principalmente a través de la picadura de garrapatas infectadas del género Ixodes. La borreliosis afecta tanto a humanos como a animales y puede presentar síntomas que varían desde manifestaciones leves hasta complicaciones graves si no se trata adecuadamente.

Definición de borreliosis

La borreliosis es una enfermedad zoonótica transmitida por garrapatas y causada por bacterias del género Borrelia. Entre las especies más comunes implicadas en la enfermedad están Borrelia burgdorferi, responsable de la enfermedad de Lyme, y otras como Borrelia afzelii y Borrelia garinii, que también afectan a humanos.

Transmisión de la borreliosis

La transmisión de la borreliosis ocurre cuando una garrapata infectada pica a un humano o a un animal huésped. Las garrapatas del género Ixodes, especialmente la garrapata de patas negras o garrapata del venado (Ixodes scapularis), son los principales vectores. La bacteria Borrelia se encuentra en el intestino de la garrapata y se transfiere al huésped durante la alimentación de la garrapata, que puede durar varias horas.

Síntomas de la borreliosis

Los síntomas de la borreliosis pueden variar ampliamente dependiendo de la etapa de la enfermedad. Se dividen en tres fases principales:

1. Fase temprana localizada

En esta fase, los síntomas iniciales incluyen:

• Eritema migratorio: una erupción cutánea en forma de "ojo de buey" que aparece alrededor del sitio de la picadura en un plazo de 3 a 30 días.
• Fiebre, fatiga y dolores musculares: síntomas similares a los de la gripe.

2. Fase diseminada temprana

Si no se trata, la infección puede diseminarse y causar:

• Dolores articulares: artritis transitoria, especialmente en las rodillas.
• Afecciones neurológicas: parálisis facial, meningitis o neuropatías periféricas.
• Afectación cardíaca: miocarditis o bloqueos cardíacos.

3. Fase tardía

En casos crónicos o avanzados, pueden presentarse:

• Artritis crónica: dolor e inflamación persistente en las articulaciones.
• Alteraciones neurológicas: encefalopatía o neuropatías crónicas.
• Fatiga crónica: una sensación persistente de agotamiento extremo.

Diagnóstico de la borreliosis

El diagnóstico de la borreliosis se basa en una combinación de factores clínicos, epidemiológicos y de laboratorio:

• Historia clínica: presencia de síntomas característicos y antecedentes de exposición a áreas endémicas de garrapatas.
• Examen físico: observación del eritema migratorio y otros signos clínicos.
• Pruebas serológicas: detección de anticuerpos contra Borrelia mediante ELISA o Western blot.
• Pruebas moleculares: PCR para identificar el ADN de Borrelia en muestras de sangre o tejido.

Tratamiento de la borreliosis

El tratamiento de la borreliosis incluye el uso de antibióticos específicos, dependiendo de la etapa de la enfermedad y de las manifestaciones clínicas:

1. Tratamiento en la fase temprana

• Doxiciclina: se administra durante 10 a 21 días.
• Amoxicilina: una alternativa en pacientes alérgicos a las tetraciclinas o en mujeres embarazadas.

2. Tratamiento en la fase avanzada

• Ceftriaxona intravenosa: para casos graves con afectación neurológica o cardíaca.
• Seguimiento: evaluación regular para monitorizar la resolución de los síntomas.

Prevención de la borreliosis

La prevención de la borreliosis se centra en evitar las picaduras de garrapatas mediante:

• Uso de ropa adecuada: cubrir brazos y piernas en áreas endémicas.
• Aplicación de repelentes: productos a base de DEET o permetrina.
• Revisión corporal: inspeccionar la piel y eliminar garrapatas inmediatamente.

© Clínica Universidad de Navarra 2023