DICCIONARIO MÉDICO

Descematocele

Qué es el descematocele

El descematocele es una patología ocular caracterizada por el adelgazamiento extremo de la córnea, en el cual únicamente permanece intacta la membrana de Descemet, la capa más interna de esta estructura. Este cuadro se considera una urgencia oftalmológica, ya que si no se trata de manera oportuna, puede evolucionar hacia la perforación corneal y la pérdida de la visión.

El descematocele representa el estado avanzado de ulceración corneal, en el que el epitelio, la membrana de Bowman y el estroma corneal han sido destruidos, dejando expuesta únicamente la membrana de Descemet. Este tipo de lesión pone en riesgo la integridad estructural del globo ocular.

Importancia del diagnóstico temprano

La detección y manejo inmediato del descematocele es crucial para prevenir complicaciones graves, como la perforación corneal y la endoftalmitis, que pueden causar ceguera irreversible.

Causas del descematocele

El descematocele puede ser provocado por múltiples factores, que incluyen infecciones, traumatismos y enfermedades autoinmunes. La identificación de la causa subyacente es fundamental para el tratamiento efectivo.

Causas infecciosas

  • Queratitis bacteriana: infecciones severas por microorganismos como Pseudomonas aeruginosa y Staphylococcus aureus.
  • Queratitis fúngica: común en regiones tropicales y subtropicales, causada por hongos como Fusarium y Aspergillus.
  • Queratitis herpética: causada por el virus del herpes simple, que puede generar necrosis corneal.

Causas traumáticas

  • Traumatismos corneales: heridas penetrantes o abrasiones profundas que predisponen a infecciones.
  • Exposición a productos químicos: sustancias corrosivas que dañan severamente la córnea.

Otras causas

  • Enfermedades autoinmunes: como el síndrome de Stevens-Johnson o el pénfigo ocular.
  • Úlceras corneales no infecciosas: asociadas a ojos secos graves o exposición prolongada.

Síntomas del descematocele

Los síntomas del descematocele suelen ser graves y progresivos, afectando significativamente la calidad de vida del paciente.

Síntomas comunes

  • Dolor ocular intenso: debido a la exposición de terminaciones nerviosas en la córnea.
  • Pérdida de visión: por irregularidades en la superficie corneal y opacidades.
  • Enrojecimiento ocular: causado por inflamación y congestión vascular.

Síntomas avanzados

  • Edema corneal: asociado con daño extenso al tejido.
  • Secreción purulenta: en casos de infecciones secundarias.

Diagnóstico del descematocele

El diagnóstico del descematocele requiere una evaluación oftalmológica completa que incluye pruebas específicas para determinar la extensión del daño y la causa subyacente.

Examen clínico

  • Biomicroscopía: permite observar la córnea y evaluar el daño estructural.
  • Tinción con fluoresceína: identifica áreas de pérdida epitelial y la presencia del descematocele.

Pruebas complementarias

  • Cultivo microbiológico: para identificar agentes infecciosos y determinar la sensibilidad a antibióticos.
  • Tomografía de coherencia óptica (OCT): evalúa la profundidad y el grosor corneal.

Tratamiento del descematocele

El tratamiento del descematocele se enfoca en preservar la integridad del globo ocular, detener la progresión del daño y restaurar la visión en la medida de lo posible.

Tratamiento médico

  • Antibióticos tópicos: para tratar infecciones bacterianas.
  • Antifúngicos: en casos de infecciones micóticas.
  • Lubricantes oculares: para proteger y mantener la superficie corneal húmeda.

Tratamiento quirúrgico

  • Trasplante de córnea: indicado en casos graves para reemplazar tejido dañado.
  • Tarsorrafia: cierre temporal de los párpados para proteger la córnea.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

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