Gangrena de Fournier

Qué es la gangrena de Fournier

La gangrena de Fournier es una forma rara y grave de gangrena que afecta los tejidos blandos de la región genital, el periné y, en ocasiones, el área abdominal baja. Es una infección necrotizante de rápida progresión que compromete la piel, la fascia y los tejidos subyacentes debido a una combinación de infecciones bacterianas. Esta condición es una emergencia médica que requiere un tratamiento inmediato para evitar complicaciones graves o la muerte.

Causas de la gangrena de Fournier

Las causas de la gangrena de Fournier suelen estar relacionadas con infecciones polimicrobianas que incluyen bacterias aerobias y anaerobias. Los factores predisponentes incluyen:

• Lesiones o heridas: Cortes, abscesos o infecciones cutáneas en la región genital o perianal.
• Enfermedades crónicas: Diabetes mellitus, obesidad o inmunosupresión.
• Cirugías previas: Procedimientos quirúrgicos en la región genital o perineal que resulten en infecciones.
• Traumatismos: Lesiones en los genitales o el periné.

Síntomas de la gangrena de Fournier

Los síntomas de la gangrena de Fournier incluyen:

• Dolor intenso: En el área genital o perineal, que puede extenderse rápidamente.
• Enrojecimiento e inflamación: Hinchazón y eritema en la región afectada.
• Necrosis: Aparición de áreas de tejido negro o muerto.
• Fiebre y síntomas sistémicos: Escalofríos, malestar general y signos de shock séptico en casos avanzados.

Gangrena de Fournier en mujeres

Aunque la gangrena de Fournier es más frecuente en hombres, también puede presentarse en mujeres, afectando los genitales externos y el periné. En mujeres, las infecciones urogenitales, abscesos perianales o cirugías ginecológicas previas son factores de riesgo comunes.

¿La gangrena de Fournier es contagiosa?

No, la gangrena de Fournier no es contagiosa. Es una infección que ocurre debido a la proliferación de bacterias en un entorno propicio, como heridas o tejido comprometido, pero no se transmite de persona a persona.

Diagnóstico de la gangrena de Fournier

El diagnóstico de la gangrena de Fournier se basa en:

• Historia clínica y examen físico: Evaluación de síntomas y signos característicos como necrosis y dolor intenso.
• Pruebas de laboratorio: Hemograma, marcadores inflamatorios elevados y hemocultivos para identificar bacterias.
• Pruebas de imagen: Tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (RM) para determinar la extensión del daño tisular.

Tratamiento de la gangrena de Fournier

El tratamiento de la gangrena de Fournier debe ser inmediato y agresivo para prevenir la propagación de la infección y salvar la vida del paciente. Incluye:

1. Antibióticos de amplio espectro: Para combatir las bacterias aerobias y anaerobias responsables de la infección.
2. Desbridamiento quirúrgico: Eliminación de todo el tejido muerto y drenaje de abscesos.
3. Cuidados intensivos: Soporte para mantener las funciones vitales en casos de shock séptico.
4. Terapia con oxígeno hiperbárico: Mejora la oxigenación de los tejidos dañados y reduce la proliferación bacteriana.

Pronóstico y seguimiento

El pronóstico de la gangrena de Fournier depende de la rapidez con la que se inicie el tratamiento y la extensión de la infección. La recuperación puede requerir múltiples cirugías y cuidados prolongados. Es fundamental un seguimiento médico estrecho para prevenir complicaciones o recurrencias.

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