DICCIONARIO MÉDICO
Glándula ecrina
La glándula ecrina es una de las principales glándulas sudoríparas del cuerpo humano. Su función principal es la producción de sudor para regular la temperatura corporal y mantener el equilibrio hídrico. Estas glándulas están distribuidas ampliamente por toda la piel, especialmente en áreas como las palmas de las manos, las plantas de los pies y la frente. La secreción producida por las glándulas ecrinas, conocida como sudor ecrino, es principalmente agua con pequeñas cantidades de electrolitos y compuestos orgánicos. Las glándulas ecrinas son glándulas sudoríparas de tipo exocrino que se encuentran en la dermis de la piel. Estas glándulas están especializadas en la secreción de un sudor claro y acuoso que ayuda a disipar el calor a través de la evaporación. Son esenciales para el control térmico del cuerpo, especialmente en ambientes cálidos o durante la actividad física intensa. La estructura y función de las glándulas ecrinas las distinguen de las glándulas apocrinas, que producen una secreción más viscosa asociada a regiones específicas del cuerpo como las axilas y la región genital. Las glándulas ecrinas están distribuidas por toda la piel, pero su densidad varía dependiendo de la región del cuerpo. Las áreas con mayor concentración de estas glándulas incluyen: En promedio, el cuerpo humano contiene entre 2 y 4 millones de glándulas ecrinas, distribuidas en diferentes proporciones según la región corporal. Las glándulas ecrinas tienen una estructura tubular simple enrollada en su base, lo que les permite secretar sudor de manera eficiente. Su anatomía incluye las siguientes partes principales: Las glándulas ecrinas desempeñan varias funciones esenciales para el mantenimiento de la homeostasis corporal. Entre las principales funciones se encuentran: El sudor ecrino es una secreción acuosa compuesta principalmente por agua (aproximadamente un 99%) y pequeñas cantidades de: La producción de sudor es regulada por el sistema nervioso autónomo, principalmente a través de estímulos del sistema simpático que activan las glándulas ecrinas en respuesta al calor, estrés o ejercicio físico. Las glándulas ecrinas pueden verse afectadas por diversas condiciones médicas que alteran su función normal. Algunas de las patologías más comunes incluyen: La hiperhidrosis es una condición caracterizada por una sudoración excesiva e incontrolada, que afecta principalmente las palmas de las manos, plantas de los pies y la axila. Esta afección puede interferir significativamente con las actividades diarias y la calidad de vida. La anhidrosis es la incapacidad de producir sudor de manera adecuada, lo que puede llevar a una acumulación peligrosa de calor en el cuerpo. Puede ser causada por daño en las glándulas sudoríparas, trastornos neurológicos o ciertas condiciones metabólicas. También conocida como sarpullido por calor, la miliaria ocurre cuando los conductos sudoríparos se bloquean, causando irritación y pequeñas protuberancias en la piel. Es común en climas cálidos y húmedos. El diagnóstico de problemas relacionados con las glándulas ecrinas incluye: El tratamiento de las alteraciones en las glándulas ecrinas depende de la condición específica. Las opciones incluyen: © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es una glándula ecrina?
Localización de las glándulas ecrinas
Estructura de las glándulas ecrinas
Componentes principales
Funciones de las glándulas ecrinas
Producción de sudor ecrino
Alteraciones y enfermedades de las glándulas ecrinas
Hiperhidrosis
Anhidrosis
Miliaria
Diagnóstico de alteraciones en las glándulas ecrinas
Tratamiento de las alteraciones de las glándulas ecrinas
Tratamientos para la hiperhidrosis
Tratamientos para la anhidrosis
Tratamientos para la miliaria
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