DICCIONARIO MÉDICO

Hiperclorhidria

La hiperclorhidria es una condición médica caracterizada por la producción excesiva de ácido clorhídrico en el estómago. Este ácido es fundamental para la digestión de los alimentos y para proteger al organismo de microorganismos dañinos. Sin embargo, cuando se produce en exceso, puede causar síntomas molestos como ardor, dolor epigástrico y reflujo ácido, además de predisponer a enfermedades como úlceras gástricas y esofagitis.

Las causas de la hiperclorhidria son diversas e incluyen factores genéticos, alteraciones hormonales, infecciones y el uso prolongado de ciertos medicamentos. Aunque no siempre requiere tratamiento, su manejo adecuado es crucial para prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida del paciente.

Qué es la hiperclorhidria

La hiperclorhidria se define como el aumento anormal en la secreción de ácido clorhídrico por las células parietales del estómago. En condiciones normales, este ácido mantiene un pH gástrico bajo, esencial para la activación de enzimas digestivas como la pepsina y para destruir microorganismos patógenos. Sin embargo, cuando los niveles de ácido son excesivos, el equilibrio de la mucosa gástrica puede alterarse, causando irritación e inflamación.

Esta condición no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma o un hallazgo asociado a otras patologías del tracto gastrointestinal, como la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) o la gastritis.

Causas de la hiperclorhidria

Factores genéticos y hormonales

Algunos individuos tienen una predisposición genética a producir mayores cantidades de ácido gástrico. Además, alteraciones en el control hormonal de la secreción ácida, como un aumento en los niveles de gastrina, pueden contribuir a la hiperclorhidria.

Infecciones

La infección por Helicobacter pylori, una bacteria que coloniza la mucosa gástrica, puede aumentar la producción de ácido en las etapas iniciales de la infección. Esta condición puede evolucionar hacia la hipersecreción ácida y, en algunos casos, hacia úlceras gástricas o duodenales.

Consumo de medicamentos

El uso prolongado de ciertos fármacos, como los antiinflamatorios no esteroideos (AINEs), puede dañar la barrera mucosa del estómago, lo que estimula la producción excesiva de ácido clorhídrico.

Estilo de vida y alimentación

Factores como el consumo excesivo de alcohol, tabaco, alimentos picantes y bebidas carbonatadas pueden irritar la mucosa gástrica y favorecer la hipersecreción ácida.

Trastornos endocrinos

Condiciones como el síndrome de Zollinger-Ellison, caracterizado por tumores productores de gastrina (gastrinomas), pueden provocar una secreción excesiva de ácido gástrico.

Diagnóstico de la hiperclorhidria

El diagnóstico de la hiperclorhidria se basa en una combinación de la historia clínica, los síntomas del paciente y pruebas diagnósticas específicas. Los procedimientos comunes incluyen:

  • pH-metría gástrica: Mide los niveles de acidez en el estómago durante un periodo de 24 horas.
  • Endoscopia digestiva alta: Permite visualizar el estado de la mucosa gástrica y detectar lesiones como úlceras o esofagitis.
  • Pruebas para Helicobacter pylori: Incluyen el test del aliento, la prueba de antígenos en heces y biopsias gástricas.
  • Análisis de sangre: Para medir los niveles de gastrina en casos sospechosos de síndrome de Zollinger-Ellison.

Tratamiento de la hiperclorhidria

El manejo de la hiperclorhidria depende de su causa subyacente y la severidad de los síntomas. Las opciones terapéuticas incluyen:

  • Inhibidores de la bomba de protones (IBPs): Reducen significativamente la producción de ácido gástrico y se utilizan ampliamente para tratar condiciones como la ERGE y las úlceras gástricas.
  • Antagonistas de los receptores H2: Disminuyen la secreción ácida bloqueando los receptores de histamina en las células parietales.
  • Erradicación de Helicobacter pylori: Mediante la combinación de antibióticos y terapia antisécretora.
  • Modificaciones dietéticas: Evitar alimentos irritantes, bebidas carbonatadas y alcohol.
  • Manejo del estrés: Técnicas de relajación y manejo del estrés pueden ayudar a reducir la secreción ácida en algunos pacientes.

Cuándo acudir al médico

Es importante consultar a un médico si se presentan:

  • Ardor o dolor persistente en la parte superior del abdomen.
  • Síntomas de reflujo ácido frecuentes, como regurgitación o acidez.
  • Pérdida de peso inexplicada o dificultad para tragar.
  • Heces negras o vómitos con sangre, que podrían indicar una úlcera gástrica.

Preguntas frecuentes

¿La hiperclorhidria puede curarse?

El tratamiento puede aliviar los síntomas y controlar la producción de ácido gástrico, pero la cura depende de la causa subyacente. En casos como la infección por Helicobacter pylori, la erradicación puede resolver la hipersecreción ácida.

¿Qué alimentos deben evitarse en la hiperclorhidria?

Se recomienda evitar alimentos picantes, cítricos, café, alcohol y comidas grasosas, ya que pueden estimular la producción de ácido o irritar la mucosa gástrica.

¿Qué complicaciones puede causar la hiperclorhidria no tratada?

Si no se trata, la hiperclorhidria puede llevar a úlceras gástricas, esofagitis por reflujo y, en casos severos, hemorragias gastrointestinales.

¿El estrés puede causar hiperclorhidria?

El estrés puede aumentar la producción de ácido gástrico en algunas personas, exacerbando los síntomas de hiperclorhidria, aunque no es la única causa.

¿Qué especialista trata la hiperclorhidria?

La hiperclorhidria es tratada por gastroenterólogos, quienes se especializan en trastornos del sistema digestivo.

© Clínica Universidad de Navarra 2023