DICCIONARIO MÉDICO
Hipospadias
Las hipospadias son una anomalía congénita en la que el meato urinario no se encuentra en la punta del glande, sino en una posición más ventral, a lo largo del pene o en áreas cercanas al perineo. Esta condición puede variar en gravedad y ubicación, afectando tanto la funcionalidad como la apariencia del órgano genital masculino. Es una de las anomalías urogenitales más comunes en recién nacidos. El término hipospadias describe una anomalía estructural del pene en la que el orificio uretral se encuentra desplazado desde su ubicación normal en el glande hacia posiciones más proximales. Este defecto está relacionado con una alteración en el desarrollo de la uretra durante la gestación, específicamente entre las semanas 8 y 14. Existen diferentes tipos de hipospadias, clasificados según la localización del meato urinario: El hipospadias balánico es el tipo más leve, en el que el meato urinario se encuentra cerca de la base del glande. Generalmente, no afecta significativamente la funcionalidad y puede no requerir tratamiento quirúrgico. En este caso, el orificio uretral está localizado entre el glande y el cuerpo del pene. Puede estar asociado con una ligera curvatura del pene. El hipospadias peneano es una forma más severa, en la que el meato urinario se encuentra en el cuerpo del pene. Este tipo suele acompañarse de curvatura notable y requiere intervención quirúrgica. El hipospadias perineal es el tipo más grave, con el meato urinario ubicado en la región perineal. A menudo está asociado con otras anomalías urogenitales y requiere múltiples cirugías para su corrección. Las causas del hipospadias no siempre están claras, pero se asocian a factores genéticos, hormonales y ambientales. Los antecedentes familiares de hipospadias aumentan significativamente el riesgo de esta anomalía. Algunas mutaciones genéticas que afectan la formación de la uretra también están implicadas. La deficiencia de testosterona o una respuesta insuficiente a esta hormona durante la gestación puede interferir en el desarrollo normal de la uretra y el pene. Si no se corrige, el hipospadias puede causar: El tratamiento del hipospadias es quirúrgico y depende de la severidad del caso. En general, la cirugía se realiza entre los 6 y 18 meses de vida. Aunque la cirugía es generalmente exitosa, pueden surgir complicaciones como fistulas uretrales, infecciones o recurrencia de la curvatura, que pueden requerir intervenciones adicionales. Es crucial buscar atención médica si se observa un desplazamiento anormal del meato urinario en el recién nacido. El diagnóstico temprano permite planificar adecuadamente el tratamiento y minimizar complicaciones futuras. En la mayoría de los casos tratados adecuadamente, el hipospadias no afecta la fertilidad. Sin embargo, los casos severos pueden requerir evaluación adicional en la adultez. La cirugía se realiza bajo anestesia general, por lo que el niño no sentirá dolor durante el procedimiento. El manejo postoperatorio incluye analgesia adecuada para minimizar el malestar. Sí, es importante realizar controles periódicos para asegurar la funcionalidad urinaria y evaluar posibles complicaciones. En casos leves, donde no hay problemas funcionales o estéticos significativos, puede no ser necesario un tratamiento quirúrgico. No obstante, cada caso debe ser evaluado individualmente. © Clínica Universidad de Navarra 2023Qué es el hipospadias
Características principales
Tipos de hipospadias
Hipospadias balánico
Hipospadias balanoprepucial
Hipospadias peneana
Hipospadias perineal
Causas del hipospadias
Factores genéticos
Factores hormonales
Factores ambientales
Consecuencias del hipospadias
Tratamiento del hipospadias
Objetivos de la cirugía
Complicaciones postoperatorias
Cuándo acudir al médico
Preguntas frecuentes
¿El hipospadias afecta la fertilidad?
¿Es dolorosa la cirugía de hipospadias?
¿Se necesita seguimiento a largo plazo?
¿Existen alternativas no quirúrgicas?