DICCIONARIO MÉDICO

Hongo

En el ámbito médico, el término hongo se refiere a un organismo eucariota perteneciente al reino Fungi, que incluye una variedad de especies con relevancia clínica, como levaduras, mohos y hongos dimórficos. Los hongos pueden ser comensales en el cuerpo humano, desempeñando un papel en la microbiota normal, pero también pueden convertirse en patógenos oportunistas, causando infecciones superficiales, subcutáneas o sistémicas conocidas como micosis.

Qué es hongo

Los hongos son organismos eucariotas que carecen de clorofila, lo que significa que no pueden realizar fotosíntesis. En cambio, obtienen nutrientes a través de la absorción, descomponiendo materia orgánica en el medio ambiente. Existen en una variedad de formas, incluyendo células unicelulares como las levaduras y estructuras multicelulares como los mohos y las setas.

Desde una perspectiva médica, los hongos que afectan a los humanos suelen clasificarse según su forma de crecimiento y las enfermedades que provocan. Algunos ejemplos de infecciones micóticas comunes incluyen la candidiasis, la aspergilosis y la histoplasmosis.

Características de los hongos

Biología de los hongos

Los hongos presentan características únicas que los diferencian de otros microorganismos:

  • Pared celular: Compuesta de quitina y glucanos, proporciona rigidez y protección.
  • Reproducción: Pueden reproducirse sexual o asexualmente mediante esporas.
  • Metabolismo: Obtienen energía mediante la descomposición de materia orgánica.

Clasificación de los hongos

En medicina, los hongos se clasifican en:

  • Levaduras: Organismos unicelulares, como Candida albicans.
  • Mohos: Organismos multicelulares con hifas, como Aspergillus.
  • Hongos dimórficos: Pueden existir como levaduras o mohos dependiendo de las condiciones, como Histoplasma capsulatum.

Enfermedades causadas por hongos

Las infecciones fúngicas o micosis pueden clasificarse según su localización y severidad:

Micosis superficiales

Afectan las capas externas de la piel, cabello y uñas. Ejemplo: tiña y onicomicosis.

Micosis subcutáneas

Involucran capas más profundas de la piel, tejido subcutáneo y, a veces, huesos. Ejemplo: esporotricosis.

Micosis sistémicas

Afectan múltiples órganos y sistemas, generalmente en pacientes inmunocomprometidos. Ejemplo: aspergilosis invasiva.

Micosis oportunistas

Ocurren en individuos con sistemas inmunitarios debilitados. Ejemplo: candidiasis sistémica.

Aplicaciones terapéuticas de los hongos

Además de ser patógenos, los hongos tienen aplicaciones médicas significativas:

  • Antibióticos: Hongos como Penicillium producen compuestos antimicrobianos.
  • Inmunosupresores: Ejemplo: ciclosporina, derivada de hongos.
  • Antifúngicos: Compuestos desarrollados para tratar infecciones micóticas.

Cuándo acudir al médico

Es importante buscar atención médica si se presentan:

  • Erupciones cutáneas persistentes o que empeoran.
  • Síntomas respiratorios en pacientes inmunocomprometidos.
  • Fiebre recurrente o pérdida de peso sin causa aparente.

Precauciones y recomendaciones

  • Evitar ambientes húmedos: Reducir la exposición a áreas propensas al crecimiento de hongos.
  • Fortalecer el sistema inmune: Mantener una dieta equilibrada y controlar enfermedades subyacentes.
  • Uso prudente de antibióticos: Para prevenir infecciones fúngicas oportunistas.

Preguntas frecuentes sobre el hongo

¿Cómo se diagnostican las infecciones por hongos?

Se utilizan técnicas como cultivo, microscopía y pruebas moleculares para identificar el hongo causante.

¿Qué factores predisponen a las infecciones fúngicas?

Entre ellos están la inmunosupresión, el uso prolongado de antibióticos y enfermedades crónicas como la diabetes.

¿Pueden las infecciones por hongos ser mortales?

Sí, especialmente en casos de micosis sistémicas en pacientes inmunocomprometidos.

¿Cómo se previenen las infecciones fúngicas?

Manteniendo una buena higiene, evitando ambientes húmedos y fortaleciendo el sistema inmune.

© Clínica Universidad de Navarra 2023