Neumomediastino

El neumomediastino, también conocido como enfisema mediastínico, es una condición médica caracterizada por la presencia de aire en el mediastino, que es el espacio anatómico situado en el centro del tórax entre los pulmones. Este fenómeno puede surgir de diversas causas y está relacionado con otras afecciones, como el enfisema subcutáneo. Aunque en algunos casos es benigno y autolimitado, el neumomediastino también puede ser un indicador de afecciones graves que requieren atención médica inmediata.

Qué es el neumomediastino

El neumomediastino ocurre cuando el aire ingresa al mediastino debido a lesiones, enfermedades subyacentes o complicaciones quirúrgicas. Este aire puede provenir de los pulmones, las vías respiratorias, el esófago o incluso el cuello. Dependiendo de la cantidad de aire y de las estructuras afectadas, el neumomediastino puede causar síntomas leves, como dolor torácico, o problemas más severos, como dificultad respiratoria.

Causas del neumomediastino

El neumomediastino puede ser causado por:

Trauma torácico: lesiones penetrantes o contusas en el tórax.
Ruptura de alvéolos pulmonares: como ocurre en pacientes con asma grave o tos excesiva.
Barotrauma: asociado con ventilación mecánica o buceo.
Procedimientos médicos: como endoscopias, biopsias pulmonares o inserción de catéteres.
Infecciones: que producen necrosis en los tejidos pulmonares.

Síntomas del neumomediastino

Los síntomas más comunes del neumomediastino incluyen:

Dolor torácico: que puede ser agudo y empeorar con la respiración profunda.
Enfisema subcutáneo: sensación de burbujeo al palpar la piel en cuello o tórax.
Disnea: dificultad para respirar.
Disfonía: cambios en la voz debido a la compresión de estructuras mediastínicas.

Diagnóstico del neumomediastino

El diagnóstico del neumomediastino se realiza mediante:

Radiografía de tórax (RX neumomediastino): puede revelar aire en el mediastino.
Tomografía axial computarizada (TAC neumomediastino): proporciona imágenes detalladas para identificar la extensión del aire.
Examen físico: detección de enfisema subcutáneo o signos clínicos asociados.

Tratamiento del neumomediastino

El tratamiento del neumomediastino depende de la causa subyacente y la gravedad de los síntomas:

Neumomediastino leve: suele resolverse espontáneamente con reposo y oxigenoterapia.
Neumomediastino a tensión: requiere intervención urgente para liberar el aire atrapado.
Infecciones asociadas: tratamiento con antibióticos de amplio espectro.

Cuándo acudir al médico

Se debe buscar atención médica inmediata si se presentan:

Dolor torácico intenso: o que no mejora.
Dificultad para respirar: progresiva o repentina.
Presencia de enfisema subcutáneo: palpable en el cuello o tórax.

Precauciones

Para prevenir complicaciones asociadas con el neumomediastino, considere:

Evitar actividades de alto riesgo: como el buceo sin la preparación adecuada.
Seguir recomendaciones médicas: especialmente después de procedimientos quirúrgicos.

Preguntas frecuentes sobre el neumomediastino

¿El neumomediastino siempre es grave?

No, en muchos casos el neumomediastino es benigno y autolimitado. Sin embargo, ciertas causas, como un neumomediastino a tensión, pueden poner en riesgo la vida si no se tratan rápidamente.

¿Cuál es el papel de la oxigenoterapia en el tratamiento?

La oxigenoterapia ayuda a acelerar la reabsorción del aire en el mediastino, siendo especialmente útil en casos leves de neumomediastino.

¿El enfisema subcutáneo siempre acompaña al neumomediastino?

No necesariamente. Aunque es un signo frecuente, no siempre está presente en pacientes con neumomediastino.

¿Se puede prevenir el neumomediastino?

En algunos casos sí, especialmente evitando actividades de riesgo o siguiendo recomendaciones médicas tras procedimientos quirúrgicos o médicos.