DICCIONARIO MÉDICO
Onfalitis
La onfalitis, conocida también como infección del ombligo o umbilitis, es una condición médica que implica la inflamación del ombligo y sus alrededores, siendo más común en recién nacidos y lactantes, aunque no exclusiva de estos grupos de edad. La onfalitis se origina cuando bacterias patógenas encuentran un medio propicio en el remanente umbilical postnatal o en el ombligo adulto, debido a prácticas de higiene inadecuadas, curación inapropiada del muñón umbilical, o a través de pequeñas lesiones que facilitan la entrada de microorganismos. Los agentes causantes más frecuentes incluyen bacterias como Staphylococcus aureus, Escherichia coli, y en ocasiones, especies de Candida en casos de infecciones fúngicas. Los síntomas de la onfalitis pueden variar desde enrojecimiento, calor y sensibilidad en la zona umbilical hasta la presencia de secreción purulenta o serosa, mal olor, y en casos más severos, fiebre y signos de irritabilidad en lactantes. Es crucial el reconocimiento temprano de estos síntomas para evitar complicaciones como la celulitis, peritonitis, o sepsis, condiciones que, aunque raras, pueden poner en riesgo la vida del paciente. El diagnóstico de la onfalitis se realiza mediante la evaluación clínica de los síntomas y signos evidentes durante la exploración física. En ciertas situaciones, puede ser necesario realizar cultivos de la secreción umbilical para identificar el agente patógeno específico y determinar la sensibilidad a los antibióticos, lo que facilita la selección de un tratamiento dirigido y más efectivo. El abordaje terapéutico de la onfalitis depende de la gravedad de la infección. En casos leves, puede ser suficiente la limpieza meticulosa del área con soluciones antisépticas y la aplicación de antibióticos tópicos. Sin embargo, las infecciones moderadas a graves requieren el uso de antibióticos sistémicos. La elección del antibiótico se basará en el espectro de acción más adecuado para los microorganismos prevalentes en la comunidad o identificados en el cultivo. En situaciones excepcionales, puede ser necesaria la intervención quirúrgica para drenar abscesos o tratar complicaciones. La prevención de la onfalitis en recién nacidos y lactantes incluye el cuidado apropiado del cordón umbilical, manteniendo la zona seca y limpia hasta su caída y cicatrización completa. Se recomienda limpiar el área umbilical con alcohol al 70% en cada cambio de pañal, evitar baños de inmersión hasta que el ombligo haya cicatrizado completamente y asegurar una higiene adecuada. En adultos, la prevención se centra en mantener una higiene umbilical adecuada, especialmente en individuos con pliegues abdominales pronunciados o piercing umbilicales, ya que estas condiciones pueden favorecer la acumulación de humedad y la proliferación bacteriana. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es la onfalitis?
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