DICCIONARIO MÉDICO
Opioide
Los opioides son una clase de medicamentos utilizados principalmente para el alivio del dolor moderado a severo. Estos compuestos ejercen su efecto al unirse a receptores específicos en el sistema nervioso central, lo que resulta en una disminución de la percepción del dolor y, en algunos casos, una sensación de euforia. Sin embargo, su uso prolongado o indebido puede llevar a la dependencia, adicción y otros efectos adversos graves. Históricamente, los opioides han sido utilizados por la humanidad durante siglos, con registros que datan de la antigua Mesopotamia y el antiguo Egipto. A lo largo del tiempo, diversas culturas han empleado sustancias como el opio, derivado de la planta de adormidera, con fines medicinales, rituales y recreativos. Sin embargo, con el avance de la ciencia y la medicina, se han desarrollado compuestos opioides sintéticos y semisintéticos más potentes y específicos para el tratamiento del dolor. Los opioides ejercen su acción principal al unirse a receptores opioides en el sistema nervioso central, principalmente en el cerebro y la médula espinal. Estos receptores se encuentran en áreas involucradas en la percepción del dolor, así como en la regulación del estado de ánimo y las funciones autónomas del cuerpo. Al unirse a estos receptores, los opioides inhiben la transmisión de señales dolorosas y modifican la percepción del dolor por parte del individuo. Entre los opioides más comúnmente prescritos se encuentran la morfina, la codeína, la oxicodona, la hidrocodona, la tramadol y la fentanilo, entre otros. Cada uno de estos compuestos tiene diferentes potencias, perfiles de seguridad y duraciones de acción, lo que permite a los profesionales de la salud seleccionar el tratamiento más adecuado para cada paciente según su condición clínica y necesidades individuales. El uso de opioides está indicado en el tratamiento del dolor agudo y crónico de moderado a severo, como el asociado con cirugías, traumatismos, cáncer y enfermedades crónicas degenerativas. Además del alivio del dolor, los opioides también pueden tener otros efectos beneficiosos, como la mejora de la función respiratoria en pacientes con insuficiencia respiratoria crónica. Sin embargo, a pesar de sus beneficios terapéuticos, el uso de opioides conlleva riesgos significativos. Uno de los principales riesgos asociados con los opioides es el desarrollo de tolerancia y dependencia, lo que puede llevar a un aumento de la dosis y la dificultad para suspender el medicamento sin experimentar síntomas de abstinencia. Además, el uso indebido de opioides, ya sea mediante la administración de dosis más altas que las prescritas o la combinación con otras sustancias, puede aumentar el riesgo de sobredosis y muerte. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es un opioide?
¿Quiere estar al día sobre temas de salud?
Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos