DICCIONARIO MÉDICO
Osteotomía cuneiforme
¿Qué es una osteotomía cuneiforme? La osteotomía cuneiforme es un procedimiento quirúrgico especializado en ortopedia que implica el corte y la remoción de una sección de hueso en forma de cuña. Este tipo de osteotomía se utiliza ampliamente para corregir deformidades angulares en huesos largos y en ciertas articulaciones, mejorando así la alineación y la función de la extremidad afectada. La técnica cuneiforme permite a los cirujanos realizar ajustes precisos en el ángulo y la longitud de los huesos, lo cual es fundamental en el tratamiento de una variedad de condiciones ortopédicas, desde deformidades congénitas hasta secuelas de lesiones traumáticas y enfermedades degenerativas. El procedimiento de osteotomía cuneiforme se basa en principios biomecánicos sólidos y requiere una comprensión detallada de la anatomía y la fisiología ósea. La cuña de hueso removida puede variar en tamaño y orientación, dependiendo de la naturaleza específica de la deformidad y los objetivos terapéuticos del procedimiento. Una vez que se extrae la cuña ósea, los segmentos restantes del hueso se aproximan y se fijan en su nueva posición, utilizando dispositivos de fijación interna como placas, tornillos o grapas, para promover la consolidación ósea en la alineación deseada. Las indicaciones para una osteotomía cuneiforme son variadas y dependen de la evaluación clínica y radiológica detallada del paciente. Entre las aplicaciones más comunes se encuentran la corrección de la deformidad en varo o valgo de la rodilla, el tratamiento de ciertas formas de pie plano o pie cavo, la corrección de deformidades en el antepié como el hallux valgus (juanetes), y la realineación de huesos mal consolidados tras fracturas. Esta técnica también se emplea en procedimientos de acortamiento o alargamiento óseo, así como en la corrección de deformidades rotacionales. La planificación preoperatoria para una osteotomía cuneiforme es esencial para garantizar un resultado exitoso. Esto incluye un análisis detallado de la deformidad mediante estudios de imagen avanzados, como radiografías, tomografía computarizada (TC) y resonancia magnética (RM), que proporcionan información valiosa sobre la morfología ósea y las estructuras adyacentes. La planificación quirúrgica precisa permite al cirujano determinar el tamaño y la orientación óptimos de la cuña ósea a remover, así como la técnica de fijación más adecuada para estabilizar el hueso durante el proceso de curación. El proceso de recuperación tras una osteotomía cuneiforme varía según la ubicación y la magnitud del procedimiento, así como de las características individuales del paciente. Generalmente, implica un período de descarga de peso o movilidad limitada en la extremidad operada, seguido de un programa de rehabilitación física diseñado para restaurar la movilidad, la fuerza y la función. La fisioterapia juega un papel crucial en el proceso de recuperación, ayudando a los pacientes a alcanzar los mejores resultados posibles tras la cirugía. Aunque la osteotomía cuneiforme puede ofrecer beneficios significativos en términos de corrección de deformidades y mejora de la función, como cualquier procedimiento quirúrgico, conlleva riesgos de complicaciones. Estos pueden incluir infección, lesiones nerviosas o vasculares, no unión o mal unión del hueso, y la necesidad de intervenciones quirúrgicas adicionales. La selección cuidadosa de los pacientes, una técnica quirúrgica meticulosa y un seguimiento postoperatorio adecuado son esenciales para minimizar estos riesgos y optimizar los resultados quirúrgicos. © Clínica Universidad de Navarra 2023
¿Quiere estar al día sobre temas de salud?
Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos