DICCIONARIO MÉDICO
Queiloplastia
La queiloplastia es un procedimiento quirúrgico que tiene como objetivo mejorar la apariencia y la funcionalidad de los labios. Esta palabra proviene del griego "cheilo", que significa labio, y "plastia", que significa formar o moldear. El procedimiento puede ser realizado por diversas razones, incluyendo la reconstrucción después de un trauma o una enfermedad, la corrección de malformaciones congénitas o por razones estéticas. La queiloplastia puede ser clasificada en varios tipos, dependiendo de la intención del procedimiento. Por ejemplo, la queiloplastia de aumento implica la inyección de materiales de relleno o la implantación de tejidos para incrementar el volumen de los labios. Estos rellenos pueden ser temporales, como el ácido hialurónico, o permanentes, como los implantes de silicona. Por otro lado, la queiloplastia de reducción implica la eliminación de tejido para disminuir el tamaño de los labios que son demasiado grandes. La queiloplastia también puede ser utilizada para mejorar la simetría de los labios, para corregir irregularidades o para crear una forma de labio más deseable. Además, en los casos de malformaciones congénitas como el labio leporino, la queiloplastia puede ser una parte integral de la reconstrucción para mejorar tanto la apariencia como la funcionalidad de los labios. Antes de someterse a una queiloplastia, los pacientes deben tener una consulta con el cirujano plástico para discutir sus metas y expectativas. Durante esta consulta, el cirujano puede evaluar la anatomía de los labios del paciente, la calidad de su piel, su historial médico y cualquier condición de salud subyacente que pueda afectar la cirugía o la recuperación. Además, el cirujano puede explicar los detalles del procedimiento, los posibles riesgos y complicaciones, y el cuidado postoperatorio necesario. El procedimiento de queiloplastia se realiza generalmente bajo anestesia local o sedación consciente. La duración de la cirugía varía dependiendo de la complejidad del procedimiento, pero generalmente dura entre una y dos horas. Durante la cirugía, el cirujano hará incisiones precisas en los labios para minimizar la cicatrización visible y luego modificará la forma y el tamaño de los labios según lo discutido durante la consulta preoperatoria. Después de la queiloplastia, es normal experimentar algo de hinchazón y malestar en los labios. Estos síntomas generalmente se resuelven dentro de una a dos semanas. Para manejar el dolor, el cirujano puede prescribir medicamentos para el dolor. Además, se recomienda evitar actividades que puedan aumentar la presión o la tensión en los labios, como besar, morderse los labios o soplar con fuerza. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es la queiloplastia?
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