DICCIONARIO MÉDICO
Quiste folicular
El quiste folicular, también conocido como quiste de folículo piloso o quiste de ovario, es una formación quística benigna que puede aparecer en varias partes del cuerpo, como la piel y los ovarios. Este tipo de quiste se forma a partir de un folículo, ya sea un folículo piloso en la piel o un folículo ovárico en los ovarios. En la piel, los quistes foliculares son una condición común que afecta a personas de todas las edades. Estos quistes se forman cuando las células de la piel que rodean un folículo piloso comienzan a multiplicarse y se acumulan, formando un saco lleno de material queratinizado. Los quistes foliculares cutáneos pueden variar en tamaño desde pequeños bultos apenas perceptibles hasta grandes masas que pueden causar molestias y problemas estéticos. Clínicamente, los quistes foliculares cutáneos se presentan como nódulos subcutáneos firmes y redondos que pueden moverse libremente bajo la piel. La piel sobre el quiste puede ser normal o puede presentar un pequeño orificio central, que es la apertura del folículo piloso. Estos quistes son generalmente asintomáticos, pero pueden volverse dolorosos si se inflaman o se infectan. En los ovarios, los quistes foliculares son una condición frecuente en las mujeres en edad reproductiva. Los ovarios de las mujeres contienen miles de folículos ováricos, cada uno de los cuales puede potencialmente liberar un óvulo durante el ciclo menstrual. Sin embargo, en algunos casos, un folículo puede crecer más de lo normal y formar un quiste. Estos quistes son generalmente benignos y a menudo desaparecen por sí mismos en unos pocos meses. Los quistes foliculares ováricos pueden ser asintomáticos o pueden causar síntomas como dolor abdominal, hinchazón, y cambios en el ciclo menstrual. En algunos casos, un quiste folicular ovárico puede romperse, lo que puede causar un dolor abdominal repentino e intenso. Esta es una situación que requiere atención médica inmediata. El diagnóstico de los quistes foliculares se basa en la correlación de los hallazgos clínicos y de las pruebas de imagen. En la piel, el diagnóstico puede ser clínico, aunque la ecografía puede ser útil para confirmar la presencia de un quiste y para diferenciarlo de otras lesiones subcutáneas. En los ovarios, la ecografía transvaginal es la prueba de elección para el diagnóstico de los quistes foliculares. El tratamiento de los quistes foliculares depende de su tamaño, su ubicación y los síntomas del paciente. En la piel, los quistes foliculares pueden ser extirpados quirúrgicamente si causan molestias o problemas estéticos. En los ovarios, los quistes foliculares que son pequeños y asintomáticos a menudo no requieren tratamiento, ya que suelen desaparecer por sí mismos. Sin embargo, los quistes foliculares ováricos que son grandes, sintomáticos o persistentes pueden requerir tratamiento, que puede incluir la administración de medicamentos hormonales o la extirpación quirúrgica. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es un quiste folicular?
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