DICCIONARIO MÉDICO
Reflejo gastrocólico
El reflejo gastrocólico es una respuesta fisiológica del sistema digestivo que se manifiesta tras la ingesta de alimentos. Esta reacción se caracteriza por una súbita urgencia de evacuar el contenido del intestino grueso poco después de consumir una comida. Es un reflejo que demuestra la compleja interacción entre distintas partes del aparato digestivo y cómo trabajan en conjunto para mantener la homeostasis y facilitar el proceso de digestión y excreción. Para comprender mejor el reflejo gastrocólico, es fundamental tener en cuenta la anatomía y fisiología del sistema digestivo. Cuando ingerimos alimentos, estos pasan por el esófago y llegan al estómago. El estómago, un órgano muscular en forma de saco, se encarga de mezclar y descomponer estos alimentos con ayuda del ácido gástrico. Una vez que el alimento ha sido parcialmente digerido en el estómago, pasa al intestino delgado, donde se continúa el proceso de descomposición y se absorben la mayoría de los nutrientes. Finalmente, el material no digerido y los desechos se mueven hacia el intestino grueso o colon. Cuando el estómago se llena, se expande, y esta expansión es detectada por los receptores de estiramiento en su pared. Esta señal es transmitida al sistema nervioso que, a su vez, envía mensajes a través del sistema nervioso entérico al colon, provocando un incremento en la motilidad o movimiento del colon. Esta respuesta acelerada facilita el movimiento del contenido ya presente en el colon hacia el recto, preparando espacio para el nuevo quimo que eventualmente llegará desde el intestino delgado. Este reflejo tiene varias implicancias clínicas. En algunas personas, puede ser exagerado, llevando a episodios diarreicos tras consumir alimentos. Aunque es más común en personas con síndrome del intestino irritable (SII), también puede presentarse en individuos sanos, especialmente después de una comida grande o rica en grasas. Por otro lado, algunas personas pueden tener un reflejo gastrocólico atenuado, lo que podría contribuir al estreñimiento. El reflejo gastrocólico no solo está mediado por factores mecánicos, como el estiramiento del estómago. También intervienen factores químicos. Algunos componentes de los alimentos, especialmente aquellos que no son completamente digeridos o absorbidos en el intestino delgado, pueden actuar como factores desencadenantes cuando llegan al intestino grueso. Por ejemplo, los carbohidratos no absorbibles pueden fermentarse en el colon, produciendo gases y ácidos grasos de cadena corta. Estos compuestos pueden estimular la motilidad colónica y potenciar el reflejo gastrocólico. El conocimiento del reflejo gastrocólico es crucial para los profesionales de la salud, ya que permite identificar y manejar mejor algunas afecciones gastrointestinales. Por ejemplo, en pacientes con SII que presentan diarrea postprandial, comprender este reflejo puede ayudar a adaptar las recomendaciones dietéticas y terapéuticas. La adaptación del reflejo gastrocólico varía con la edad. En los recién nacidos y lactantes, este reflejo es pronunciado, lo que explica por qué muchos bebés defecan poco después de alimentarse. Sin embargo, con el tiempo, a medida que el sistema digestivo madura, este reflejo tiende a moderarse. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Cuál es el reflejo gastrocólico?
¿Quiere estar al día sobre temas de salud?
Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos