DICCIONARIO MÉDICO

Reflejo monosináptico

¿Qué es un reflejo monosináptico?

El reflejo monosináptico es aquel en el que en su desarrollo solo interviene una sinapsis, como es el caso del reflejo miotático.

La palabra "monosináptico" proviene del griego "mono", que significa uno, y "sinapsis", que se refiere a la conexión entre dos neuronas. Como su nombre indica, el reflejo monosináptico involucra una única sinapsis entre dos neuronas: una aferente o sensitiva y una eferente o motora. Esta singular conexión permite que la respuesta refleja ocurra extremadamente rápido, ya que la información solo necesita pasar por una única conexión neuronal antes de generar una respuesta.

Un ejemplo clásico de reflejo monosináptico es el reflejo miotático o reflejo de estiramiento, como el reflejo rotuliano. Cuando el tendón del músculo cuádriceps es golpeado ligeramente con un martillo de reflejos, se produce un estiramiento rápido en el músculo. Esto lleva a la activación de los husos musculares, que son receptores sensoriales especializados ubicados dentro del músculo. Estos husos envían información a través de la neurona aferente hacia la médula espinal, donde se conectan directamente, a través de una única sinapsis, con la neurona eferente que controla la contracción del cuádriceps. Como resultado, el músculo se contrae rápidamente, causando una extensión brusca de la pierna. Todo este proceso ocurre en milisegundos, mostrando la eficiencia de este tipo de reflejo.

El reflejo monosináptico es de particular interés en la medicina debido a su utilidad en la evaluación neurológica. La presencia, ausencia o alteración de estos reflejos puede indicar problemas específicos en el sistema nervioso. Por ejemplo, un reflejo miotático exagerado podría sugerir una lesión en las vías motoras descendentes del cerebro, mientras que la ausencia de este reflejo podría indicar una lesión en el nervio periférico o en la médula espinal.

Estos reflejos también tienen importancia funcional en la vida diaria. Ayudan a mantener la postura y el tono muscular, permitiendo movimientos coordinados y estables. A nivel molecular, el reflejo monosináptico involucra la liberación de neurotransmisores, en particular el glutamato, en la sinapsis entre la neurona aferente y la eferente. Este neurotransmisor excita la neurona motora, llevando a la contracción muscular.

Dentro del panorama más amplio de la neurociencia, los reflejos monosinápticos sirven como un modelo excelente para estudiar las bases celulares y moleculares de la transmisión sináptica, así como para entender cómo se modulan estas conexiones en diferentes condiciones. A pesar de su simplicidad relativa, hay mucho que aprender sobre la plasticidad y la modulación de estas sinapsis, lo que puede tener implicaciones para el tratamiento de enfermedades neurológicas.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

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