DICCIONARIO MÉDICO
Renograma
El renograma, comúnmente referido como gammagrafía renal, es una técnica diagnóstica de la medicina nuclear que utiliza radiotrazadores para evaluar la función y estructura renal. Esta herramienta médica es fundamental para brindar una imagen detallada del flujo sanguíneo renal, la función tubular y la excreción de orina. Mediante el empleo de cámaras gamma, se obtienen imágenes secuenciales del riñón después de la administración intravenosa de un agente radiactivo. El procedimiento del renograma comienza con la administración de un radiotrazador. Una vez que este trazador se ha introducido en el sistema circulatorio del paciente, se distribuye por todo el cuerpo. Sin embargo, debido a las características químicas y biológicas del trazador, se acumula principalmente en los riñones, lo que permite obtener imágenes claras y precisas de estos órganos. La técnica de renograma es particularmente útil para evaluar a pacientes con hipertensión de origen renal o para determinar la causa de la insuficiencia renal. Además, es esencial para monitorizar la función renal antes y después de procedimientos quirúrgicos urológicos y para evaluar posibles obstrucciones en el sistema urinario. Una de las grandes ventajas del renograma es su capacidad para proporcionar información funcional y anatómica simultáneamente. Por ejemplo, no solo puede mostrar la forma y posición de los riñones, sino que también puede proporcionar datos sobre cómo están funcionando estos órganos, cuán eficientemente están filtrando la sangre y cómo está fluyendo la orina a través de los uréteres hasta la vejiga. Existen diferentes tipos de renogramas dependiendo del radiotrazador empleado y del objetivo específico de la prueba. Los renogramas pueden ser estáticos o dinámicos. Los renogramas estáticos ofrecen una imagen fija del riñón en un momento determinado, mientras que los renogramas dinámicos capturan una serie de imágenes a lo largo del tiempo, lo que permite visualizar el paso del trazador a través de los riñones. En términos de preparación, generalmente se requiere que el paciente esté bien hidratado antes del procedimiento para garantizar una adecuada filtración renal. Sin embargo, las instrucciones específicas pueden variar según el tipo de renograma y las condiciones clínicas del paciente. Uno de los radiotrazadores más comunes utilizados en renogramas es el ácido dimercaptosuccínico (DMSA). El renograma DMSA es particularmente útil para evaluar cicatrices renales, malformaciones y otras anormalidades estructurales del riñón. Otro trazador frecuente es el MAG3, utilizado para evaluar la función renal y posibles obstrucciones. Aunque el renograma es una herramienta extremadamente útil, no está exento de limitaciones. La interpretación de los resultados puede ser compleja y puede requerir la correlación con otros estudios de imagen o pruebas de laboratorio. Además, aunque la exposición a la radiación es relativamente baja, siempre se debe justificar la necesidad del estudio y garantizar que el beneficio clínico supere el potencial riesgo radiológico. La seguridad del paciente es primordial. Aunque las reacciones alérgicas a los radiotrazadores son raras, pueden ocurrir, por lo que siempre es esencial tener un equipo médico preparado para manejar cualquier eventualidad. Además, debido a la exposición a la radiación, esta prueba no se recomienda para mujeres embarazadas a menos que sea absolutamente necesario. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es un renograma?
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