DICCIONARIO MÉDICO
Trabeculoplastia
La trabeculoplastia es un procedimiento médico utilizado en el tratamiento de ciertos tipos de glaucoma, una enfermedad ocular caracterizada por un aumento en la presión intraocular que puede resultar en daño al nervio óptico y, si no se trata, puede provocar la pérdida de la visión. Específicamente, la trabeculoplastia se utiliza comúnmente para tratar el glaucoma de ángulo abierto, el tipo más común de glaucoma, que se produce cuando el sistema de drenaje del ojo, conocido como malla trabecular, se obstruye, lo que resulta en un aumento de la presión intraocular. La trabeculoplastia se realiza con la ayuda de un láser y consiste en aplicar una serie de pequeños pulsos de energía láser a la malla trabecular en un intento de mejorar su funcionamiento y permitir un mayor drenaje del humor acuoso, el líquido que se produce y se drena continuamente en el ojo. La energía láser causa cambios estructurales en las células de la malla trabecular que pueden resultar en una mayor apertura de los canales de drenaje y, en consecuencia, en una disminución de la presión intraocular. Hay dos tipos principales de trabeculoplastia: la trabeculoplastia con láser argón (TLA) y la trabeculoplastia selectiva con láser (TSL). En la TLA, se utiliza un láser argón para tratar toda la malla trabecular, mientras que en la TSL, se utiliza un láser Nd:YAG para tratar selectivamente las células de pigmento en la malla trabecular sin causar daño térmico al tejido circundante. La trabeculoplastia es un procedimiento ambulatorio que generalmente se realiza bajo anestesia local y puede durar entre 10 y 20 minutos. Después del procedimiento, los pacientes pueden experimentar una leve irritación o enrojecimiento en el ojo, pero estos efectos secundarios son generalmente temporales y pueden aliviarse con medicamentos antiinflamatorios. En términos de eficacia, varios estudios han demostrado que la trabeculoplastia puede resultar en una reducción significativa de la presión intraocular en muchos pacientes con glaucoma de ángulo abierto. Sin embargo, los efectos de la trabeculoplastia pueden disminuir con el tiempo, y algunos pacientes pueden requerir tratamientos adicionales para mantener su presión intraocular bajo control. Como todos los procedimientos médicos, la trabeculoplastia puede tener riesgos y efectos secundarios, incluyendo la inflamación ocular, el aumento temporal de la presión intraocular, y, en casos raros, la pérdida de la visión. Sin embargo, estos riesgos son generalmente bajos, y la trabeculoplastia es considerada un procedimiento seguro y efectivo para el tratamiento del glaucoma de ángulo abierto. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es la trabeculoplastia?
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