DICCIONARIO MÉDICO
Traumatismo abdominal
El traumatismo abdominal se refiere a cualquier tipo de lesión que afecta al abdomen, región del cuerpo que alberga muchos órganos vitales como el hígado, el bazo, los riñones, el estómago, los intestinos, la vejiga, el páncreas y otros componentes del sistema digestivo y urinario. La naturaleza de la lesión puede ser diversa, oscilando entre un daño menor en la pared abdominal hasta una lesión severa y potencialmente mortal de uno o más órganos internos. Este tipo de traumatismo puede ser el resultado de una amplia variedad de situaciones, desde accidentes automovilísticos, caídas, heridas por arma de fuego o blanca, hasta golpes contundentes durante la práctica deportiva o la actividad laboral. La gravedad del traumatismo abdominal dependerá de múltiples factores, incluyendo la fuerza y dirección del impacto, el objeto que causó la lesión, y la salud general de la persona antes del incidente. El diagnóstico del traumatismo abdominal puede ser un desafío, especialmente en los casos donde la lesión no es evidente en la superficie de la piel. Los signos y síntomas pueden variar considerablemente, y pueden incluir dolor abdominal, sensibilidad, distensión, hematomas o heridas visibles, náuseas, vómitos, shock y, en algunos casos, signos de sangrado interno como palidez, sudoración, taquicardia y hipotensión. En ocasiones, los síntomas pueden no ser inmediatos y pueden desarrollarse con el paso del tiempo. El enfoque diagnóstico ante la sospecha de un traumatismo abdominal suele incluir una evaluación clínica cuidadosa y la realización de pruebas de imagen, como la ecografía (particularmente el FAST, por sus siglas en inglés, Focused Assessment with Sonography for Trauma), la tomografía computarizada (TC) y, en ocasiones, la resonancia magnética (RM). En casos seleccionados, puede ser necesaria una exploración quirúrgica, ya sea a través de una laparoscopia o una laparotomía, para evaluar el alcance del daño y llevar a cabo las reparaciones necesarias. El tratamiento del traumatismo abdominal varía según la gravedad de la lesión. En casos de lesiones menores, puede ser suficiente con el reposo, la vigilancia clínica y el manejo del dolor. En casos de lesiones más graves, puede ser necesaria la hospitalización, la reanimación con líquidos y transfusiones de sangre, y en muchas ocasiones la cirugía. El objetivo principal del tratamiento es estabilizar al paciente, controlar la hemorragia, y reparar o eliminar los órganos dañados para prevenir complicaciones a largo plazo como las infecciones y la peritonitis. La recuperación tras un traumatismo abdominal puede variar desde unos pocos días hasta meses, y depende del grado de la lesión, la salud general del individuo, la rapidez con la que se haya recibido atención médica y la eficacia del tratamiento brindado. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es un traumatismo abdominal?
¿Quiere estar al día sobre temas de salud?
Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos