DICCIONARIO MÉDICO

Traumatismo raquimedular

¿Qué es un traumatismo raquimedular?

El traumatismo raquimedular, también conocido como lesión de la médula espinal, es una afección médica grave que ocurre cuando se produce un daño en cualquier parte de la médula espinal o los nervios del extremo de la columna vertebral. Se trata de una condición que puede alterar permanentemente la fuerza, la sensibilidad y otras funciones corporales por debajo del lugar de la lesión, afectando profundamente la calidad de vida del individuo.

La médula espinal es una estructura vital del sistema nervioso central que corre desde la base del cerebro hasta la región lumbar baja. Está compuesta por nervios que transmiten señales entre el cerebro y el resto del cuerpo, facilitando funciones como el movimiento y la sensación. Cualquier daño a esta estructura puede resultar en la interrupción de estas funciones, lo que puede llevar a síntomas como parálisis y pérdida de sensación.

El traumatismo raquimedular puede ser causado por una serie de factores, aunque el más común es el trauma físico. Esto puede incluir accidentes automovilísticos, caídas, lesiones deportivas y actos de violencia, como heridas de bala o puñaladas. Las lesiones pueden variar desde contusiones hasta laceraciones, y en los casos más graves, pueden resultar en la transección completa de la médula espinal. Además, ciertas enfermedades y afecciones médicas, como el cáncer, la espondilosis cervical y la estenosis espinal, también pueden causar lesiones raquimedulares.

Las lesiones raquimedulares se clasifican según el nivel de la médula espinal en el que se produzca la lesión. Esto puede ser cervical, torácico, lumbar o sacro. La localización de la lesión tiene un impacto significativo en la funcionalidad del paciente, ya que las áreas del cuerpo que están controladas por los nervios por debajo del nivel de la lesión pueden verse afectadas.

El diagnóstico de una lesión raquimedular se basa en una evaluación médica que puede incluir un examen físico y neurológico, así como pruebas de imagen como radiografías, tomografías computarizadas y resonancias magnéticas. Estas pruebas pueden ayudar a determinar la localización y la gravedad de la lesión.

El tratamiento del traumatismo raquimedular puede ser muy variado y depende de la naturaleza y la gravedad de la lesión. En muchos casos, el objetivo inicial del tratamiento es estabilizar la columna vertebral para prevenir más daño. Esto puede requerir cirugía para alinear la columna vertebral y, en algunos casos, puede implicar la fusión de ciertas vértebras.

Además de la estabilización espinal, el manejo de las lesiones raquimedulares también implica el tratamiento de los síntomas y la prevención de las complicaciones secundarias. Esto puede incluir el manejo del dolor, la prevención de las úlceras por presión y la prevención de las infecciones del tracto urinario. Además, la rehabilitación es un aspecto crucial del manejo de las lesiones raquimedulares y puede incluir terapia física, terapia ocupacional y terapia del habla para ayudar a mejorar la funcionalidad y la calidad de vida.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

¿Quiere estar al día sobre temas de salud?

Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos

La información proporcionada en este Diccionario Médico de la Clínica Universidad de Navarra tiene como objetivo principal ofrecer un contexto y entendimiento general sobre términos médicos y no debe ser utilizada como fuente única para tomar decisiones relacionadas con la salud. Esta información es meramente informativa y no sustituye en ningún caso el consejo, diagnóstico, tratamiento o recomendaciones de profesionales de la salud. Siempre es esencial consultar a un médico o especialista para tratar cualquier condición o síntoma médico. La Clínica Universidad de Navarra no se responsabiliza por el uso inapropiado o la interpretación de la información contenida en este diccionario.