Tricorexomanía

¿Qué es la tricorexomanía?

La tricorexomanía es una variante de la tricotilomanía. Es un trastorno de arrancarse el pelo, es una afección psiquiátrica crónica que implica una necesidad irresistible de arrancarse el cabello de manera repetitiva, lo que genera angustia y disfunción social o laboral significativa. Este comportamiento de arrancarse el cabello puede darse en cualquier parte del cuerpo donde crezca pelo, aunque los lugares más comunes son el cuero cabelludo, las pestañas y las cejas. En algunos casos, los individuos pueden arrancarse el cabello de otras áreas, como las axilas o la región pubiana.

En términos de etiología, la tricorexomanía se considera un trastorno del control de los impulsos y puede estar relacionada con otros trastornos como el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), el trastorno de estrés postraumático y la depresión. Aunque la causa exacta de la tricorexomanía es desconocida, se cree que una combinación de factores genéticos, neurológicos y ambientales puede contribuir a su desarrollo.

Los pacientes con tricorexomanía a menudo presentan áreas de calvicie o adelgazamiento del cabello en las regiones afectadas. Además, el arrancarse el pelo puede causar daño en la piel, como abrasiones o irritaciones. Aunque este comportamiento puede ser consciente o inconsciente, los pacientes suelen experimentar una sensación de alivio o satisfacción después de arrancarse el pelo.

Aunque la tricorexomanía puede desarrollarse en cualquier momento, se observa con mayor frecuencia en la adolescencia temprana, que es un período de desarrollo en el que se producen cambios hormonales, estrés y ajustes en la identidad personal. La tricorexomanía puede afectar a individuos de cualquier género, aunque se observa con más frecuencia en mujeres que en hombres.

El diagnóstico de tricorexomanía se basa en los criterios clínicos definidos en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), que incluyen la presencia de esfuerzos repetidos para arrancarse el cabello, la angustia o la disfunción social o laboral debido a la conducta de arrancarse el pelo, y la ausencia de otra afección médica o psiquiátrica que pueda explicar esta conducta.

El tratamiento de la tricorexomanía se basa en un enfoque multimodal que incluye terapia cognitivo-conductual, técnicas de manejo del estrés, asesoramiento y, en algunos casos, medicación. La terapia cognitivo-conductual puede ayudar a los individuos a identificar los desencadenantes que llevan a arrancarse el pelo y a desarrollar habilidades de afrontamiento más saludables. En algunos casos, los medicamentos como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina pueden ser útiles. Sin embargo, el tratamiento debe ser personalizado para cada individuo, teniendo en cuenta su edad, su estado de salud general y sus necesidades específicas.

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