DICCIONARIO MÉDICO
Trofoedema
El trofoedema es una condición patológica que se caracteriza por el aumento del tamaño de una extremidad o de una parte del cuerpo debido a la presencia de líquido en los tejidos, acompañada de cambios degenerativos y tróficos en la piel y en los tejidos subyacentes. La palabra "trofoedema" deriva del griego "trofo", que significa "nutrición", y "edema", que significa "hinchazón". Por tanto, este término se refiere a una hinchazón que está asociada con cambios nutricionales o tróficos en los tejidos. La aparición de trofoedema puede estar asociada a una variedad de condiciones médicas, tales como enfermedades venosas crónicas, insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal, malnutrición y ciertos trastornos metabólicos. También puede ocurrir como resultado de un traumatismo o una cirugía, especialmente en casos donde se ha producido daño a los vasos linfáticos o venosos, lo que provoca una acumulación de líquido en los tejidos. En términos clínicos, el trofoedema se manifiesta por una hinchazón que puede ser leve o severa, dependiendo de la gravedad de la condición subyacente. Esta hinchazón es a menudo dolorosa y puede limitar la movilidad de la extremidad afectada. Además, la piel y los tejidos subyacentes pueden presentar cambios característicos, como endurecimiento, cambios de color, aparición de úlceras y signos de infección. El diagnóstico de trofoedema se realiza mediante una evaluación clínica, que incluye un examen físico detallado y una revisión de la historia clínica del paciente. En algunos casos, pueden ser necesarios exámenes adicionales, como la ecografía Doppler para evaluar el flujo sanguíneo en las venas y las arterias, la linfografía para evaluar el sistema linfático, y la biopsia de piel para investigar los cambios en los tejidos. El tratamiento del trofoedema es complejo y debe ser personalizado para cada paciente, dependiendo de la causa subyacente, la gravedad de los síntomas y el estado general de salud del paciente. En muchos casos, el tratamiento implica una combinación de medidas conservadoras, como el uso de medias de compresión, el drenaje linfático manual, los ejercicios de movilidad y la elevación de la extremidad afectada. La terapia farmacológica también puede ser útil, y puede incluir diuréticos para reducir la retención de líquidos, antibióticos para tratar las infecciones, y medicamentos para mejorar la circulación y reducir la inflamación. En casos severos, puede ser necesaria la cirugía para aliviar la hinchazón y mejorar la función de la extremidad. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es trofoedema?
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