DICCIONARIO MÉDICO
Trombopenia
La trombopenia, también conocida como trombocitopenia, es una afección médica caracterizada por un número bajo de plaquetas (trombocitos) en la sangre. Las plaquetas son células diminutas pero cruciales en la coagulación sanguínea, cuya función principal es formar coágulos para detener el sangrado. Cuando el número de plaquetas en la sangre es bajo, puede aumentar el riesgo de sangrado y hematomas, incluso con lesiones menores. La trombopenia puede ser causada por varios factores, que a menudo se agrupan en tres categorías: producción reducida de plaquetas en la médula ósea, aumento de la descomposición de las plaquetas en el torrente sanguíneo y aumento de la descomposición de las plaquetas en el bazo o el hígado. La producción de plaquetas puede verse afectada por una serie de afecciones, como leucemia, anemia aplásica, ciertos tipos de cáncer, exposición a radiación o quimioterapia, y deficiencias nutricionales como falta de vitamina B12, ácido fólico o hierro. El aumento de la descomposición de las plaquetas puede ser el resultado de condiciones como el embarazo, infecciones bacterianas en la sangre, lupus eritematoso sistémico, reacciones a medicamentos y ciertas enfermedades genéticas. Los síntomas de la trombopenia pueden variar dependiendo de su gravedad. Algunas personas con trombopenia leve pueden no tener síntomas en absoluto. Cuando los síntomas ocurren, pueden incluir hematomas fáciles, sangrado prolongado de cortes, sangrado de encías o nariz, sangrado menstrual abundante, petequias (manchas rojas pequeñas en la piel causadas por sangrado capilar), púrpura (manchas de color púrpura causadas por sangrado debajo de la piel) y, en casos graves, sangrado en órganos internos. El diagnóstico de la trombopenia generalmente comienza con un examen físico y una revisión de la historia médica del paciente. Una prueba de sangre llamada conteo sanguíneo completo (CBC) puede confirmar un bajo recuento de plaquetas. Para determinar la causa de la trombopenia, se pueden realizar pruebas adicionales, como análisis de sangre para buscar infecciones, enfermedades autoinmunes o deficiencias nutricionales, una prueba de médula ósea para examinar la producción de plaquetas, y pruebas de imagen como ultrasonido o tomografía computarizada para examinar el tamaño del bazo. El tratamiento de la trombopenia depende de su causa y gravedad. En casos de trombopenia leve sin síntomas, puede que no se requiera ningún tratamiento, pero se debería realizar un seguimiento regular para monitorear el recuento de plaquetas. Si la trombopenia es causada por una afección subyacente, como una infección o una enfermedad autoinmune, el tratamiento de esa afección puede ayudar a aumentar el recuento de plaquetas. © Clínica Universidad de Navarra 2023¿Qué es la trombopenia?
¿Quiere estar al día sobre temas de salud?
Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos