Cuál es la mejor forma de dejar de fumar
Que el tabaco es perjudicial para la salud pero que es muy difícil dejar de fumar no es algo nuevo. Y que realmente queremos hacerlo y no lo conseguimos, es un hecho real.
Según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), el tabaquismo es una enfermedad crónica que afecta a alrededor del 25% de la población general española mayor de 15 años de edad, y es causante de un gran número de enfermedades. Por eso, los especialistas del Departamento de Neumología de la Clínica Universidad de Navarra ofrecen una serie de consejos clave para conseguir eliminar el tabaco de nuestra vida.
- Buscar un motivo: pensar detenidamente las razones por las que se fuma. Necesitamos motivos reales, no debemos seguir un impulso porque se puede ir rápidamente. Además los especialistas recomiendan escribirlas en un papel.
- Llevar un registro: durante unos días apuntar todos los cigarrillos, las circunstancias en las que se fuma y el grado de necesidad que se tiene. Esto ayuda a conocer las situaciones asociadas al hecho de fumar y prever la manera de afrontarlas.
- Poner una fecha: elegir un día concreto para dejar de fumar. Sin embargo, en ocasiones, es difícil dejar de fumar totalmente, por eso se puede probar a ir disminuyendo la cantidad de cigarrillos poco a poco.
- Pequeños objetivos: pensar solo en el día concreto: hoy no va a fumar
- Ser positivos: hay que eliminar los pensamientos negativos, como por ejemplo, lo difícil que será conseguirlo.
- Quitar de casa todo lo relacionado con el tabaco: ceniceros, cigarrillos, mecheros etc…
- Calcular el dinero que se gasta en fumar y planear en qué usarlo (algo que apetezca desde hace tiempo).
- Comenzar a realizar algún ejercicio físico suave: le relajará, le ayudará a controlar el peso y observará beneficios que se obtienen al dejar de fumar.
- Evitar beber alcohol y bebidas a las que se asocia el cigarro: café, cerveza…
- Tomar grandes cantidades de agua o de zumo de fruta, ricos en vitamina C, le ayudará a eliminar la nicotina.
- Masticar chicle sin azúcar y tener algo entre las manos: esto le ayudará a calmar el componente oral y/o manual.
- Practicar ejercicios de relajación sencillos, por ejemplo respirar profundamente varias veces.
- Es bueno buscar apoyo de amigos o de la familia, puede facilitar mucho el trabajo.
El tabaco causa daño para la salud y, además, crea adicción. Prueba de ello es que la mayoría de los fumadores quieren dejar de fumar y solo uno de cada diez que lo intentan sin ayuda lo logra.
Algunos fumadores experimentan una gran dificultad para conseguirlo e incluso parece que determinados genes pueden predisponer a la adicción a la nicotina. Estas personas necesitarán ayuda de fármacos y un seguimiento y, con frecuencia, varios intentos.
En la Clínica existe un Programa de Deshabituación Tabáquica, que busca facilitar a los fumadores el abandono del tabaco, mediante el seguimiento médico y el apoyo profesional continuado. El Departamento de Neumología cuenta con más de 10 años de experiencia en estos programas.