Cáncer durante el embarazo y la preservación de la fertilidad
Un área de la salud de la mujer, integral y especializada.
Esta será una de las prioridades estratégicas en atención asistencial que la Clínica Universidad de Navarra ofrecerá en su nueva sede en Madrid, cuya apertura está prevista para el otoño de este año.
La nueva unidad potenciará el desarrollo de las terapias más avanzadas para tratar el cáncer ginecológico.
Una de las principales novedades de esta unidad es su multidisciplinariedad, ya que la paciente se podrá beneficiar de un plan de tratamiento rápido y coordinado entre ginecólogos, oncólogos médicos, radioterapeutas, cirujanos, pediatras y patólogos. Esta especialidad se ofrecerá tanto en la sede actual de Pamplona como en la sede de Madrid.
El hospital universitario se dotará de una unidad específica de ginecología oncológica especializada en preservación de fertilidad y cáncer y embarazo, con atención médica en 24 horas e inicio de tratamiento en 48 horas.
“Nuestro objetivo es proteger en todo momento la vida de la madre y del feto”, afirma el Dr. Luis Chiva, director del Área de Salud de la Mujer de la Clínica Universidad de Navarra. Además, esta unidad estará configurada por un equipo de cirugía oncológica ginecológica centrados en la preservación de la fertilidad, para que las pacientes también puedan ser madres una vez hayan superado el tratamiento.
Los profesionales de la Clínica quieren impulsar una asistencia médica multidisciplinar con investigación y tecnología de última generación que abarque desde el diagnóstico completo hasta la última fase del tratamiento y su seguimiento.
Para ello, con el objetivo de ofrecer una atención clínica total en el mismo hospital sin tener que derivar en ningún caso a otro centro, la nueva área se estructurará en cinco subespecialidades para dotar de una atención más precisa e individualizada.
En cada una de ellas se aplicarán los protocolos de asistencia clínica ginecológica habituales de la Clínica, con la particularidad de incluir novedades específicas en las especialidades: Materno Infantil, Ginecología Oncológica, Medicina Reproductiva, Embarazos de Alto Riesgo y Salud Integral de la Mujer.
Embarazos de alto riesgo y diagnóstico de malformación
Así, la Unidad Multidisciplinar de Acompañamiento Perinatal en Embarazos de alto riesgo se encargará del cuidado y atención “individualizada y compleja”, tanto del feto, como de los padres, en casos de anomalías severas, brindando el acompañamiento y asesoramiento especializados necesarios.
“Nuestros profesionales atenderán el impacto emocional de los padres, apoyarán psicológicamente en situaciones complejas y en todos los interrogantes que se planteen las familias, acompañándoles durante y después del embarazo”, concreta el Dr. Alcázar, codirector del Área de Salud de la Mujer.
Además pondrá especial sensibilidad en aquellos embarazos en los que el feto tenga un diagnóstico de malformación y, para ello, está prevista la creación de una fundación específica. “Vamos a ofrecer alternativas positivas a la interrupción del embarazo.
Para ello impulsaremos el acompañamiento de la madre o padres con este tipo de diagnósticos”, indica el codirector. Se dedicará especial atención a los casos de síndrome de Down en los que se centrará prioritariamente la asistencia de esta entidad sin ánimo de lucro, con personal especializado.
En busca de un parto personalizado
En cuanto a las instalaciones específicas, el servicio contará con salas de dilatación-paritorio adecuadas para poder ofrecer un “parto humanizado”. El objetivo es ofrecer la posibilidad de un parto de baja intervención, atendiendo los deseos y expectativas de cada mujer a la hora de dar a luz.
“La experiencia obtenida en los mejores hospitales de Estados Unidos refrenda la necesidad de ofrecer un servicio en el que la mujer pueda elegir las condiciones que considera más adecuadas en el momento del parto”, señala el Dr. Chiva.
sí, aspectos como un ambiente silencioso, música, la decisión de tumbarse o no, o la de evitar la episiotomía, entre otros muchos, son decisiones que tomará cada mujer.
Incorpora también un quirófano específico para cesáreas y habitaciones de hospitalización obstétricas.
La ecografía de alta resolución y un área de preparación al parto, instalaciones destinadas a reanimación y la UCI específica para neonatos constituyen otras de sus características. Además, el área concederá especial importancia al programa de docencia para la formación de residentes de alto nivel de especialización.
Tratamientos naturales de fertilidad: aplicación de la Napro
La Clínica incluirá la enseñanza del reconocimiento natural de la fertilidad, la aplicación de la Napro (Natural procreation technology) y el tratamiento de la infertilidad sin manipulación embrionaria.
“Realizaremos técnicas de tratamiento de ayuda a la fertilidad sin manipulación embrionaria”, subrayan los especialistas. Además se potenciarán protocolos de tratamiento “a través de métodos que, aprendidos correctamente, tiene una eficacia elevada”, señalan.
Para la consecución de estos fines, la Unidad contará con proyectos específicos de investigación clínica y traslacional.