Artroscopia de rodilla
"En personas jóvenes, activas y deportistas habituales, el tratamiento quirúrgico mediante artroscopia es la solución definitiva".
DR. ANDRÉS VALENTÍ AZCÁRATE ESPECIALISTA. DEPARTAMENTO DE CIRUGÍA ORTOPÉDICA Y TRAUMATOLOGÍA
¿Qué es la artroscopia de rodilla?
La artroscopia de rodilla es un procedimiento quirúrgico que permite observar la articulación de la rodilla mediante pequeñas incisiones a través de la piel. La artroscopia se utiliza para diagnosticar y tratar una amplia gama de problemas de rodilla.
Durante la artroscopia de rodilla, su cirujano introduce una pequeña cámara, llamada artroscopio, en la articulación y muestra imágenes que guiarán los instrumentos quirúrgicos.
Entre las ventajas de la artroscopia, se encuentra la rápida recuperación debido a la menor agresividad quirúrgica, menor dolor, mayor rapidez en la recuperación funcional y disminución de la estancia hospitalaria o de manera ambulatoria.
¿Cuándo está indicada la artroscopia de rodilla?
Cada vez es mayor el número de intervenciones que pueden realizarse mediante la artroscopia, con grandes ventajas sobre la cirugía clásica (abierta).
Mediante la artroscopia de rodilla, hoy en día, se puede reparar y tratar problemas del cartílago, lesiones meniscales, reconstrucciones ligamentosas, extracción de cuerpo libres, limpiezas de tejido sinovial o articular entre otros procedimientos...
Las ventajas de la técnica endoscópica sobre la cirugía clásica son la más rápida recuperación del paciente y las menores molestias postoperatorias, ya que se trata de una operación menos invasiva.
Para lograr la recuperación completa de la articulación tras la realización de una artroscopia, conviene que el paciente realice ejercicios de rehabilitación que le ayudarán a la cicatrización de los tejidos y a una recuperación completa.
Indicaciones más frecuentes de una artroscopia de rodilla
- Lesiones de ligamentos
- Lesiones de menisco
- Lesiones del cartílago articular
- Sinovitis crónica
- Rigidez de la articulación
- Fracturas
- Bursitis
- Cuerpos libres intraarticulares.
¿Presenta alguna de estas enfermedades?
Puede que sea necesario realizarle una artroscopia de rodilla
¿Cómo se realiza la artroscopia de rodilla?
La cirugía de la artroscopia de rodilla
Para realizar esta técnica, el artroscopista utiliza cámaras de vídeo especialmente diseñadas y lentes de pequeño tamaño (de 1,9 mm a 4 mm), e instrumental de pequeño calibre que pueden introducirse en las articulaciones sin dañarlas (pinzas, tijeras, etc.).
Antes de su cirugía, un miembro del equipo de anestesia hablará con usted acerca de los tipos de anestesia y sus recomendaciones. La artroscopia de rodilla se puede realizar bajo anestesia loco-regional o general.
La tasa de complicaciones después de la cirugía artroscópica es por lo general muy baja. Si ocurren complicaciones, generalmente son menores y se tratan fácilmente. Los posibles problemas postoperatorios con la artroscopia de rodilla incluyen: rigidez de rodilla, molestias locales y como toda cirugía existe un riesgo de trombosis e infección (más bajo que en otro tipo de intervenciones)
Si bien la recuperación de la artroscopia de rodilla es más rápida que la recuperación de la cirugía tradicional de rodilla abierta, es importante que siga cuidadosamente las instrucciones de su médico cuando regrese a casa.
Cuidados tras la artroscopia de rodilla
Se realizará un vendaje que proteja las incisiones y realice una compresión suave. La duración de la cirugía dependerá de los hallazgos y del tratamiento necesario.
Después de la cirugía, lo trasladarán a la sala de recuperación y podrá regresar a su casa en unas horas si es un procedimiento ambulatorio o pasará a una habitación durante una noche en el caso de que así lo indique su cirujano
Tendrá que realizar los ejercicios recomendados con el objetivo de recuperar gradualmente la movilidad, disminuir el dolor y la inflamación.
Recuperación tras la artroscopia de rodilla
Muchas personas regresan a las actividades completas y sin restricciones después de la artroscopia. Su recuperación dependerá del tipo de patología que estaba presente en su rodilla.
Salvo en la reconstrucción de ligamentos, o patología de cartílago debería poder regresar a la mayoría de las actividades físicas después de 3-4 semanas, o algunas veces mucho antes.
Las actividades de mayor impacto o si su trabajo implica un trabajo pesado, puede pasar más tiempo antes de que pueda regresar a su trabajo. Discuta cuándo puede volver a trabajar de manera segura con su médico.
A veces, el daño a su rodilla puede ser lo suficientemente grave como para no revertirlo completamente con la cirugía.
Su cirujano le dirá cuándo es seguro poner peso en el pie y la pierna.
Debe ejercitar su rodilla regularmente durante varias semanas después de la cirugía. Esto restablecerá el movimiento y fortalecerá los músculos de la pierna y la rodilla. Trabajar con un fisioterapeuta puede ayudarlo a lograr su mejor recuperación. Un programa formal de fisioterapia puede mejorar su resultado final.
¿Dónde la realizamos?
EN NAVARRA Y MADRID
El Departamento de Cirugía Ortopédica y Traumatología
de la Clínica Universidad de Navarra
El Departamento de Cirugía Ortopédica y Traumatología cubre de forma completa el amplio espectro de afecciones congénitas o adquiridas del sistema músculo-esquelético incluyendo los traumatismos y sus secuelas.
Desde 1986 la Clínica Universidad de Navarra cuenta con un excelente banco de tejido osteotendinoso para disponer de injertos óseos y ofrecer las mejores alternativas terapéuticas.
Organizados en unidades asistenciales
- Cadera y rodilla.
- Columna vertebral.
- Extremidad superior.
- Ortopedia pediátrica.
- Tobillo y pie.
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¿Por qué en la Clínica?
- Expertos en cirugía artroscópica.
- Profesionales altamente cualificados que realizan técnicas pioneras para solucionar lesiones traumatológicas.
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