El CSIC, la Sociedad Española de Proteómica y la Clínica analizan el papel de las proteínas en el diagnóstico y como diana terapéutica
Más de 70 especialistas participan en la XII Reunión Científica sobre Proteómica Clínica que ha abordado su influencia en la microbiota, las enfermedades neurodegenerativas y las amiloidosis
7 de noviembre de 2023
La proteómica es el área de la biología que estudia el conjunto de proteínas expresadas por un genoma. Unas proteínas que juegan un papel fundamental en el diagnóstico y el pronóstico de enfermedades y, cada vez más, en su tratamiento como dianas terapéuticas de nuevos medicamentos.
Con el objetivo de desarrollar nuevas estrategias que permitan aplicar ese potencial tecnológico obtenido del análisis de proteínas, la Clínica Universidad de Navarra, la Sociedad Española de Proteómica y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han llevado a cabo la XIII Reunión Científica sobre Proteómica Clínica, clausurada hoy en Madrid.
Más de 70 especialistas clínicos e investigadores se han dado cita en la sede de Madrid de la Clínica para participar en estas jornadas con las que se busca impulsar nuevas líneas de investigación que contribuyan a mejorar la salud de la población. “En esta edición, nos hemos centrado en la aportación de la proteómica en tres grandes áreas: la microbiota, las enfermedades neurodegenerativas y la amiloidosis. Y de lo que se trata es de estudiar el tipo de herramientas analíticas que se están empezando a introducir en la clínica para el diagnóstico, el pronóstico o, simplemente, para entender por qué ocurren las enfermedades, en este caso, de estas áreas”, señala el Dr. Fernando J. Corrales, especialista del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC y uno de los organizadores de la reunión.
Para hablar de microbiota ha comparecido el experto internacional Jean Armengaud, del laboratorio francés de Innovación tecnológica para la Detección y el Diagnóstico de ProGénomix Ibisa Platform. “La microbiota desempeña un papel fundamental en la salud humana. Para entender cómo funcionan las comunidades microbianas, cómo interactúan con el huésped y cómo puede producirse la disbiosis, necesitamos identificar la diversidad de microorganismos presentes y cuantificar los numerosos actores moleculares que intervienen y la metaproteómica es una tecnología clave para estos estudios funcionales”, ha apuntado.
La segunda sesión ha abordado cómo el estudio de las proteínas puede ayudar en el pronóstico de enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson, ya que no solo pueden influir en el progreso de estas enfermedades, sino que tienen un gran potencial en futuros fármacos.
Prevalencia de amiloidosis
Finalmente, se ha tratado el diagnóstico de precisión de las amiloidosis, que consisten en la formación de depósitos fibrilares proteicos en múltiples órganos, provocando su disfunción.
“En los últimos años está aumentando su diagnóstico de forma importante. El tratamiento difiere dependiendo de la proteína implicada. La aplicación de técnicas proteómicas como la espectrometría de masas, permiten un diagnóstico de certeza del tipo de amiloidosis en muchos casos en los que las técnicas habituales de los laboratorios de Anatomía Patológica (por ejemplo, la inmunohistoquímica) no son concluyentes. Además, en un futuro, la proteómica puede resultar de gran ayuda para el diagnóstico temprano (otro de los retos por resolver de las amiloidosis), así como en la monitorización de la respuesta a las nuevas terapias que se están desarrollando”, explica el Dr. Ramón Lecumberri, codirector del Servicio de Hematología de la Clínica Universidad de Navarra.